Los principales candidatos que quedaron fuera de la competencia electoral en Bolivia manifestaron este domingo sus posturas con respecto al eventual ballotage, con declaraciones que parecen complicar las perspectivas de Evo Morales, presidente que busca su tercera reelección.
El senador Ortiz, de la alianza Bolivia dice No (21F), figura con algo más del 4,32 por ciento de los votos, superado por la sorpresa de estos comicios, el pastor presbiteriano de origen coreano Chi Hyun Chung, con 8.7%, que de momento ubica tercero al Partido Demócrata Cristiano.
En la “ruta” hacia “el triunfo definitivo”, el opositor Carlos Mesa (38% de los votos, frente al 45% de Morales, con datos hasta la noche del domingo) depende del camino que adopten los simpatizantes de otros partidos y poder arrastrar un voto “anti Morales” el 15 de diciembre, fecha del probable ballotage.
El tercer candidato en liza, Chi Hyun Chung, ya se ha mostrado “abierto al diálogo” con Mesa, aunque con algunas discusiones pendientes. En declaraciones a medios locales, instó a Mesa a abandonar posturas liberales en temas sociales, como lo que él denomina ideología de género: “Estoy abierto al diálogo para que entremos a una conversación, existen condiciones para bajar las banderas del arco iris, usted sabe a qué me refiero”.
Con respecto al actual mandatario, el candidato conservador advirtió que ante su “gran fracaso”, es el momento de “bajar el telón del socialismo del siglo XXI”, ya que “el 51 por ciento dijo no al socialismo”. Y descartó cualquier acercamiento con el oficialismo: “Con Evo Morales no tengo nada que hablar”.
Por su parte, Óscar Ortiz dio por hecho que Mesa será quien se enfrente a Morales en segunda vuelta: “Nosotros respetamos esa decisión y lo haremos sin ninguna condición”. “Los ciudadanos han preferido votar contra Evo Morales en lugar de elegir entre los diversos candidatos”, afirmó, dando a entender que el ex mandatario capitalizó el voto de rechazo. Con miras al ballotage, sostuvo que su apoyo a Carlos Mesa será “sin reserva ni condiciones”.
El resto de candidaturas opositoras quedan por ahora por debajo del 3 por ciento que establece la ley para que mantengan su personalidad jurídica, con lo que corren el riesgo de desaparecer del escenario político boliviano partidos históricos como el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) que gobernó el país en momentos clave.
Esta es la votación más baja que recibe Morales desde que asumió el poder en 2005 cuando ganó con el 54% de los votos. En 2009 fue ratificado con el 64% y en 2014 fue reelecto con el 61% de los sufragios.
Los militantes de Comunidad Ciudadana, el partido del centrista Mesa, celebraban en La Paz como un triunfo estos resultados porque hicieron campaña para lograr una segunda vuelta, aunque expresaron su desconfianza en las instituciones electorales, acusándolas de estar parcializadas por Morales.
En los comicios bolivianos también se renovará la Asamblea Legislativa de 130 diputados y 36 senadores. De acuerdo con las proyecciones, Evo Morales, en caso de triunfo, podría perder los dos tercios del voto que tiene actualmente.
(Con información de Europa Press y AP)
MÁS SOBRE ESTE TEMA: