Un posible triunfo del candidato oficialista Evo Morales en la primera vuelta de las elecciones está en duda, de acuerdo a la encuesta que difunden este domingo los diarios Página Siete y Los Tiempos, compartida en exclusiva para Infobae, cuando sólo faltan tres semanas para la votación general.
De acuerdo al sondeo, aplicado por la empresa Mercados y Muestras entre el 13 y el 20 de septiembre, cuando la campaña boliviana ha estado marcada por un desastre ambiental, Evo Morales consigue un respaldo de un 33 por ciento de los encuestados, seguido de los candidatos opositores Carlos Mesa, con un 26 por ciento, y por Oscar Ortiz, con un 9 por ciento. La cifra de los que todavía no han definido su voto llega a un 15 por ciento, mientras que los que dicen que votarán en blanco, nulo o ninguno, llegan a un 11 por ciento. Es precisamente el voto residual, calculado finalmente en un 26 por ciento, el que decidirá si Evo Morales gana en primera ronda la elección del 20 de octubre o si Carlos Mesa obliga a un balotaje en diciembre.
Una de las novedades y sorpresas de esta nueva encuesta nacional es la aparición del candidato coreano-boliviano, Chi Yung Chung, del PDC, con un 3 por ciento de la intención de voto, considerando que hace un mes no estaba en la contienda electoral y que ha llamado la atención por sus llamativas propuestas como la de ofrecer tratamiento psiquiátrico a las personas de la comunidad LGTBI o eliminar la televisión basura.
En general, los tres primeros candidatos presidenciales con más chance en las encuestas han registrado un leve descenso o un estancamiento respecto al anterior sondeo de la misma empresa encuestadora y los mismos medios, difundida en agosto pasado.
Otro de los datos relevantes de esta reciente investigación de opinión pública, que contempla una muestra de 3.600 casos (la mayor respecto a las anteriores entregas de Mercados y Muestras), es el resultado planteado en la pregunta de una posible segunda vuelta. En caso de que se produjera el balotaje entre Evo Morales y Carlos Mesa, sería ganado por el candidato opositor con un 44 por ciento, mientras que el presidente de Bolivia conseguiría un 39 por ciento.
Lo que no ha variado sustancialmente es la percepción ciudadana de qué candidato ganará las elecciones. Un 55 por ciento responde que Evo Morales es el posible triunfador de los comicios presidenciales.
Para que Evo Morales consiga una tercera reelección necesita ganar por un 40 por ciento y sacarle diez puntos de diferencia al segundo. Otra de las posibilidades que le permitirán que siga en el poder sin necesidad de un balotaje es que consiga el 50 por ciento más uno en el sufragio.También hay bolivianos que votan en el exterior, pero llegan a sólo un 4 por ciento del padrón, pero pueden ser decisivos en caso de una votación muy apretada.
El efecto de los incendios
En una campaña electoral, marcada durante el último mes y medio por los monumentales incendios en Bolivia, surgieron interrogantes sobre su impacto en la intención del voto, sobre todo el favorable a Evo Morales por las críticas ciudadanas a su resistencia a declarar desastre nacional en la Chiquitania.
El propio vicepresidente de Bolivia, Alvaro García Linera, reconoció que el oficialismo podría asumir un costo político. Sin embargo, apoyándose en los resultados de encuestas difundidas las pasadas dos semanas, algunos analistas han señalado que no ha habido ni habrá una incidencia mayor. Para el politólogo Luis Andia, la experiencia de elecciones en otros países muestran que este tipo de desastres no ha impactado mayormente en los votos.
Otros analistas, como José Luis Gálvez, han mencionado un posible efecto en el voto de los indecisos, pero no en el apoyo duro a Evo Morales. Dijo que el desastre refuerza el rechazo de los contrarios al presidente, pero fortalece también el respaldo de sus fieles seguidores. Donde puede percibir algún movimiento es en la posible conducta de los indecisos, cuya cifra es aún alta.
De acuerdo a Gálvez, es posible que los incendios hayan frenado la campaña de los candidatos favoritos, sobre todo la de Evo Morales, que mostraba en julio pasado una tendencia al ascenso, según algunas encuestas.
La semana pasada se difundió otro sondeo que registra un ascenso de Morales en pleno periodo de incendios y le otorgó hasta un 43 por ciento de la preferencia, lo que disparó críticas de los opositores y satisfacción de los oficialistas.
Situación de las regiones
Respecto a la intención de voto en los nueve departamentos, que es fundamental para la conformación del Poder Legislativo, actualmente dominado por el MAS, el nuevo sondeo de Mercados y Muestras, aplicada en las diez ciudades más pobladas de Bolivia y en 92 poblaciones intermedias, Evo Morales ganaría la elección en La Paz, Cochabamba, Oruro, Potosí, Beni y Pando. En cambio, Carlos Mesa vencería en Tarija, Santa Cruz y Chuquisaca.
Llama la atención el tercer lugar que conseguiría el coreano Chi Yung, pero con un porcentaje aún muy bajo, en La Paz, Chuquisaca y Oruro.
Por su lado, Oscar Ortiz, de Bolivia Dice No, disputaría el primer lugar con Mesa y con Evo Morales, en Santa Cruz, el primer departamento del país en población y el segundo del padrón electoral. Ortiz también disputa el segundo lugar en Beni.
De acuerdo a una proyección, de mantenerse la tendencia Evo Morales podría conseguir la mayoría en las cámaras de diputados y senadores, pero ya no tendría los dos tercios que tuvo hasta ahora con el MAS. Por su lado, Comunidad Ciudadana, de Carlos Mesa, sería la segunda fuerza parlamentaria y Bolivia Dice No sería la tercera.
Una campaña competitiva
A diferencia de las tres anteriores elecciones, ganadas de manera contundente por Evo Morales, con un 53 por ciento, un 64 por ciento, y un 61 por ciento, esta de ahora será más competitiva y su resultado está todavía abierto, debido al alto índice de indecisos y de las personas que dicen que votarán en blanco, nulo o por ninguno.
El politólogo Fernando Mayorga considera que ha sido hasta ahora una campaña tranquila y sin polarización, considerando que los tres principales adversarios confluyen ideológicamente o con sus propuestas hacia el centro del espectro político.
Eso no significa que por primera vez en años no tengamos en Bolivia una elección competitiva, precisó Mayorga.
Para el periodista Andrés Gómez, uno de los mayores críticos de Evo Morales, por primera vez se da la posibilidad de un triunfo de la oposición en la segunda vuelta.
Esta semana se conoció la decisión del ex presidenciable y jefe del opositor Unidad Nacional, Samuel Doria Medina, de apoyar al segundo mejor ubicado en las encuestas. Sin participar directamente en la elección ni tener una alianza oficial, Doria Medina le da su respaldo a Mesa con el argumento de que puede vencer a Morales en la primera vuelta y ser el único candidato con posibilidad de sacarlo del poder para preservar la democracia.
El Gobierno está confiado en ganar esta elección con contundencia. El vicepresidente Alvaro García Linera cree que las encuestas muestran que Evo Morales ganará los comicios en primera vuelta y la única duda es si mantendrá o no los dos tercios en el Legislativo.
Para la recta final de la campaña se ha anunciado en Santa Cruz un Cabildo en defensa de la democracia y cinco comités cívicos anunciaron un paro indefinido contra la habilitación de la candidatura de Evo Morales.