Un hijo del presidente brasileño Jair Bolsonaro causó conmoción al cuestionar la democracia en el país más grande de Latinoamérica, que en 1985 salió de una dictadura de dos décadas.
"La transformación que Brasil quiere no va a suceder a la velocidad que deseamos de manera democrática", tuiteó Carlos Bolsonaro, un asesor cercano de su padre y concejal de Río de Janeiro.
Por vias democráticas a transformação que o Brasil quer não acontecerá na velocidade que almejamos… e se isso acontecer. Só vejo todo dia a roda girando em torno do próprio eixo e os que sempre nos dominaram continuam nos dominando de jeitos diferentes!
— Carlos Bolsonaro (@CarlosBolsonaro) September 9, 2019
Bolsonaro, de 36 años, no explicó a qué se refería con "transformación", pero el partido gobernante de su padre batalla para implementar cambios económicos y sociales, ya que tuvo que formar alianzas para obtener la mayoría en el Congreso.
La ex presidente Dilma Rousseff, una ex rebelde que fue encarcelada y torturada durante el gobierno militar, condenó el tuit.
"Solo aquellos que lucharon por la democracia, que han pasado por el exilio, tortura y encarcelamiento, saben que la democracia es el único régimen posible para promover el cambio y hacer que un país como Brasil avance", dijo.
Felipe Santa Cruz, jefe del colegio de abogados, también expresó desaprobación.
"No puede aceptarse ningún ataque a la democracia, ni pueden normalizarse los impulsos autoritarios", dijo Santa Cruz, cuyo padre fue asesinado por agentes estatales durante la dictadura, según una comisión designada por el gobierno.
El martes, el colegio de abogados de Brasil participó en un panel sobre la dictadura del país en Naciones Unidas en Ginebra. José Carlos Dias, un ex miembro de la Comisión Nacional de la Verdad de Brasil, denunció lo que describió como un autoritarismo insidioso en Brasil.
Jair Bolsonaro, un político de ultraderecha que fue elegido el año pasado tras los escándalos de corrupción de los previos gobiernos de izquierda, se mofa de las insinuaciones de que Brasil se vuelve menos libre bajo su mandato.
Pero también ha hablado de forma positiva del gobierno militar de Brasil, en el cual se registraron cientos de asesinatos y desapariciones extrajudiciales.
La semana pasada elogió el golpe militar de 1973 en Chile después de que Michelle Bachelet, jefa de derechos humanos de la ONU, expresara preocupación por los asesinatos a manos de la policía brasileña y las supuestas restricciones en las libertades civiles.
Otro de los tres hijos del presidente, el legislador nacional Eduardo Bolsonaro, causó indignación el año pasado cuando dijo que sería fácil cerrar el Supremo Tribunal de Brasil.
"Ni siquiera tienes que enviar un jeep. Sólo envía un soldado y un cabo", dijo el legislador a los reclutas de la policía federal en un video que circuló en redes sociales.
Carlos Bolsonaro trató de explicar su comentario cuando tuiteó el martes que "democráticamente, las cosas no cambian rápidamente. Es un hecho".
También insinuó que la indignación era exagerada: "¿Ahora soy un dictador?", preguntó.
O que falei: por vias democráticas as coisas não mudam rapidamente. É um fato. Uma justificativa aos que cobram mudanças urgentes.
O que jornalistas espalham: Carlos Bolsonaro defende ditadura.
CANALHAS!
— Carlos Bolsonaro (@CarlosBolsonaro) September 10, 2019
El presidente siente debilidad por Carlos, quien administró las redes sociales durante su campaña presidencial. En diciembre, Bolsonaro padre lo felicitó por su cumpleaños diciendo: "Mi pitbull, gracias por siempre estar ahí".
(Con información de AP)
MÁS SOBRE ESTE TEMA: