Al menos ocho personas fueron abatidas por la policía de Río de Janeiro este lunes durante un operativo en una favela de la zona norte, de acuerdo a lo confirmado por la Policía Civil.
"Ocho sospechosos murieron en una operación" en el complejo de favelas Maré, informó a la agencia AFP un portavoz de la Policía Civil, que no reveló más detalles hasta el momento.
Imágenes que circularon en las redes sociales y canales comunitarios muestran a un helicóptero sobrevolando un conjunto de casas precarias mientras se oyen lo que parecen ser disparos.
Una foto muestra, asimismo, a un grupo de niños, miembros de la orquesta sinfónica Maré do Amanha ("Maré del mañana"), refugiándose en el corredor de la escuela para evitar contacto con el exterior y ser alcanzados por alguna bala perdida.
La aplicación OTT (Onde Tem Tiroteios, Dónde Hay Tiroteos en portugués), que informa en tiempo real sobre los disparos cotidianos que acontecen en Río, alertó a los usuarios sobre una balacera en el complejo de favelas Maré poco después del mediodía.
La operación tuvo lugar pocos días después que cifras oficiales revelaran un número récord de muertos (434) por la policía en operaciones durante el primer trimestre de este año. El estado de Río de Janeiro registró un número récord de muertes -un promedio de cinco por día- .
El período coincide con los tres primeros meses de mandato del gobernador Wilson Witzel, electo en gran parte por estar alineado con la política de "mano dura" impulsada por el presidente Jair Bolsonaro para combatir la delincuencia.
Según las cifras del Instituto de Seguridad Pública del gobierno (ISP), 434 personas murieron "por intervención de un agente del Estado" entre enero y marzo, una cifra 17,9% superior a la registrada en el mismo período de 2018.
En enero, 13 personas murieron tras una incursión policial en una favela del centro de Río, nueve de ellos en una misma casa. La operación está siendo investigada por sospechas de tortura y ejecución.
A fines de marzo, el gobernador Witzel reconoció en una entrevista al periódico O Globo que la policía ya estaba utilizando francotiradores para disparar contra sospechosos a distancia, iniciativa que había causado polémica durante la campaña electoral.
Con información de AFP
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