El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, homenajeó este martes al ex dictador paraguayo Alfredo Stroessner (1954-1989) durante un acto en la hidroeléctrica de Itaipú ante la presencia de su homólogo paraguayo, Mario Abdo Benítez, hijo del secretario personal de Stroessner.
Bolsonaro quiso "celebrar a aquellos que realmente fueron responsables" de la construcción de la represa de Itaipú, compartida por Brasil y Paraguay, y aludió tanto al ex dictador brasileño Humberto de Alencar Castelo Branco como a Stroessner, al que se refirió como "un estadista que sabía perfectamente" lo que quería para Paraguay.
"Mi homenaje al general Alfredo Stroessner", dijo el brasileño ante los aplausos del público.
Bolsonaro también se refirió al giro a la derecha dado en el continente americano con los últimos procesos electorales.
"Izquierda nunca más", gritó ante el auditorio de Itaipú, en este encuentro con motivo de la toma de posesión del nuevo director de la parte brasileña de Itaipú, Joaquim Silva e Luna.
Bolsonaro recordó que se reunirá con Abdo Benítez el próximo 12 de marzo, en Brasilia, como ampliación del encuentro de apenas media hora que tuvieron este martes antes del acto.
El presidente brasileño, al contrario que el paraguayo, concedió una rueda de prensa posterior al evento, en la que informó que habían hablado sobre el combate al crimen organizado, en concreto en la Triple Frontera, y en las formas de administrar la energía, en relación a Itaipú.
Para el brasileño, "cualquier problema del pasado quedará superado" en las futuras negociaciones sobre la represa, al tiempo que se refirió a su par como "un conservador que quiere bien a su país".
Paraguay y Brasil tienen pendiente renegociar en 2023 el Tratado de Itaipú y, en particular, el anexo C de ese documento para decidir qué hará con el 50% de la energía generada por la presa que le corresponde a Paraguay y cuyos excedentes, hasta ese año, debe venderlos al país vecino a precio de costo.
Itaipú Binacional fue creada el 17 de mayo de 1974, para administrar su construcción y puesta en funcionamiento 10 años después, en 1984.
Organizaciones de derechos humanos calculan en alrededor de medio millar los asesinados durante la dictadura en Paraguay y en 3.000 los desaparecidos, además de unos 20.000 exiliados. Tras su derrocamiento en febrero de 1989, Alfredo Stroessner se asiló en Brasil, donde falleció el 16 de agosto de 2006.
Con información de EFE
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