Un grupo de delincuentes saqueó el cementerio prehispánico "Jerusalén K'uchu", ubicado en el distrito de Combapata, en la provincia peruana de Canchis, que se estima tiene unos cinco mil años.
Según informó la prensa local, los ladrones destruyeron las tumbas para robar los adornos con los que fueron enterrados los cuerpos.
Los restos sagrados, en tanto, quedaron "tirados en una pila", consigna Daily Mail.
Una serie de fotos tomadas en el lugar muestran los huesos y cráneos humanos apilados.
Los primeros informes confirmaron que los esqueletos estaban completamente inconexos. Asimismo, los ladrones destruyeron las estructuras de piedra y barro que se utilizan para proteger los restos.
A partir de lo sucedido las autoridades iniciaron una investigación para identificar todos los objetos que fueron robados y dañados.
La organización cultural responsable del sitio denunció el robo a la Policía Nacional, que inmediatamente inició una investigación.
Sin embargo, hasta el momento no fueron identificados los responsables.
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