Katia Sastre, la policía brasileña que abatió a tiros a un hombre que intentó asaltar a un grupo de madres con sus hijos en la puerta de una escuela el pasado 12 de mayo, fue elegida diputada regional de San Pablo en las elecciones legislativas del domingo.
La oficial consiguió más de 263.000 votos y terminó en el séptimo lugar entre los postulantes a la Cámara de Diputados regionales de San Pablo, que se renovó con 70 parlamentarios.
Durante la campaña electoral, Sastre tomó el video de la cámara de seguridad que captó su reacción armada para utilizarlo como propaganda política, pero las autoridades vetaron dicho spot.
"Disparé y dispararía de nuevo. Mi hija y otros niños estaban en la mira del bandido. Reaccioné como policía y como madre. Voy a tener siempre la misma actitud en el combate al crimen. Tengo coraje", decía Katia Sastre en el video de campaña.
El pasado 12 de mayo, Sastre disfrutaba de un día de descanso y estaba a punto de ingresar a un colegio privado de Suzano, municipio en el estado brasileño de San Pablo, para asistir a un acto por el Día de la Madre cuando vio que se acercaba un delincuente armado.
La filmación, que luego circuló rápidamente por las redes sociales, muestra el instante en que, cuando los invitados esperaban por la apertura de las puertas de la escuela, el ladrón se aproximó, apuntó su revólver contra algunas de las mujeres e intentó robarles sus pertenencias.
En ese momento, Sastre sacó su arma y le disparó tres veces en el pecho. Las imágenes muestran también la huida de las personas que la rodeaban y la maniobra que hizo ella, primero para ponerse a salvo de una posible reacción y, después, para reducir al asaltante en el piso y alejar el arma de su alcance.
El ladrón, de 21 años, que portaba un revólver calibre .38 y que llegó a hacer dos disparos antes de ser tiroteado, alcanzó a ser llevado con vida a un hospital vecino, pero no resistió a las heridas y murió en el centro médico.
Luego, las autoridades informaron que la agente formaba parte del Cuarto Batallón de Acciones Especiales de la Policía en San Pablo, el estado más poblado de Brasil.
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