El ex maratonista que promete correr hasta que Daniel Ortega se vaya

Cada mañana sale de su casa vistiendo un short y una camiseta con los colores de la bandera de Nicaragua. Porta carteles alusivos a las protestas. Lo hace para pedir por la liberación de los presos políticos, reclamar justicia por los asesinatos y el adelanto de las elecciones

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Alex Vanegas porta carteles exigiendo
Alex Vanegas porta carteles exigiendo la liberación de los presos políticos mientras corre por las calles de Nicaragua

Dos días después de iniciada la crisis sociopolítica en Nicaragua, Alex Vanegas sintió desesperación. Quizás fue ansiedad. Ese día supo del asesinato del adolescente Álvaro Conrado, quien fue alcanzado por una bala mientras pasaba agua a los universitarios que protestaban y repelían la agresión de fuerzas policiales. Su reacción fue salir a caminar. Luego fueron pasando los días y los muertos aumentaron. Entonces comenzó a correr.

Decidió ir a una de las rotondas de Managua, la capital de Nicaragua, y dar una vuelta por cada persona asesinada. Cada día escogía una rotonda diferente. Recuerda que cuando se contabilizaban 65 personas muertas alguien notó que él corría vestido con los colores de la bandera de Nicaragua, azul y blanco, y un cartel con mensajes alusivos a las protestas, entre ellos "corro para correr a Daniel", e hizo un video que se volvió viral en las redes sociales.

"Me hicieron un video en la rotonda Universitaria, yo andaba con mi cartel", cuenta Vanegas, quien se ha convertido en un símbolo de las protestas antigubernamentales en Nicaragua, país que atraviesa una crisis sociopolítica desde el 18 de abril, que amenaza con colapsar la economía y ha provocado más de 300 muertos, según organismos de derechos humanos.

Miles en las calles han demandado la realización de elecciones anticipadas y la culminación del periodo de Daniel Ortega, pero el gobierno alega que las protestas son parte de un golpe de Estado, que la cantidad de muertes es inferior a la reportada por organismos como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y que todo es parte de un plan para desestabilizar al país.

"Yo voy a correr hasta que se vaya Daniel (Ortega), es mi manera de protestar. Aunque quieran desanimarme, echarme preso, no me importa. Mi protesta es completamente cívica", afirma Vanegas.

Vanegas es el mayor de
Vanegas es el mayor de 7 hermanos y se hizo maratonista después de los 40 años

¿Quién es el corredor?

Alex Vanegas tiene 63 años. Veinte años atrás un médico le sugirió cambiar sus hábitos alimenticios y hacer ejercicios para evitar padecer de diabetes, enfermedad que afecta a sus padres. "Esto es hereditario me dijo el doctor, no hay cómo capearse, te recomiendo hacer ejercicios, comer simple", cuenta Vanegas.

Así fue que empezó a caminar y luego a correr. Más tarde se integró a grupos de runner y obtuvo resistencia. Lo incluyeron en la categoría máster por tener más de 40 años y de pronto se vio participando en maratones. "Me convertí en maratonista de 42 kilómetros", dice.

Sin embargo hace unos años empezó a sentir dolores y le diagnosticaron un desgaste en las vértebras de la columna. Más tarde lo operaron de una hernia, por lo que tuvo dejar de correr. Logró mantenerse saludable caminando.

Pese a la indicación médica en la actualidad corre no solo en las rotondas de Managua, sino en las calles de los diferentes barrios de la capital y de otras ciudades. Cambia los mensajes de los carteles que porta, un día pide la liberación de los presos políticos, luego la salida del presidente Ortega, más tarde justicia por los asesinados. Se le ha visto en Camoapa, en el norte del país; en Ometepe, la paradisíaca isla ubicada en el lago Cocibolca; en Masaya, una de las ciudades más afectadas por la represión. A veces se pone un trapo en la boca, otras veces cadenas en los brazos.

Al inicio, sus familiares le suplicaron que no saliera más. Ahora, dice él, los ha convencido que "porque los quiere, hace esto".

Vanegas ha recorrido diferentes ciduades
Vanegas ha recorrido diferentes ciduades de Nicaragua como protesta contra el régimen de Ortega.

"Les he demostrado que la gente me quiere, inclusive más que alguno de mis familiares porque con esta situación estamos divididos. Pero no tengo miedo, me mataron el miedo".

En dos ocasiones ha sido detenido por la policía. Incluso una vez lo llevaron por unas horas a las celdas de máxima seguridad de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocidas como El Chipote.

Cada mañana sale de su casa con una ruta que solo él conoce. "Normalmente salgo cuando ya está claro, por si me pasa algo, que alguien me vea". En ocasiones visita a los familiares de las personas muertas en el contexto de la crisis. El día que fue entrevistado por Infobae visitó a la familia de Matt Romero, quien fue asesinado el 23 de septiembre mientras participaba en una marcha antigubernamental que fue atacada. Era estudiante de secundaria y tenía 16 años.

Durante la entrevista a veces hace pausas. Pareciera que se emociona al borde del llanto.

—¿Y no le provoca dolor correr tanto?

—Sí, ya unos doctores me revisaron gratuitamente, me dieron tratamiento. Otras personas me van a conseguir zapatos. La edad que tengo no es para andar corriendo esas distancias, pero el trato de las personas me anima, yo no tengo temor de nada, ya me mataron el miedo. Temo más por la vida de los jóvenes, el futuro de Nicaragua.

Se calcula que más de 200 personas, en su mayoría protestantes que estuvieron liderando marchas, en barricadas o en tomas de universidades, están siendo procesadas judicialmente por varios delitos, entre ellos terrorismo. La narrativa gubernamental indica que son "terroristas" y "golpistas".

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