Los colombianos detenidos en Paraguay por intentar enviar cocaína "en carbón" a Siria tienen relación con los grupos terroristas islámicos

Se desbarató una organización delictiva cuyas actividades criminales en América Latina eran dirigidas por tres colombianos cercanos a organizaciones terroristas islámicas

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En un operativo policial realizado a mediados de julio en la localidad paraguaya de Yaguarón, y en el que previamente participaron distintas agencias de seguridad, la policía desbarató una organización delictiva cuyas actividades criminales en América Latina eran dirigidas por tres colombianos cercanos a organizaciones terroristas islámicas.

Las detenciones se llevaron a cabo cuando los delincuentes pretendían despachar una carga de "cocaína negra" con destino hacia el puerto de Latakia, Siria. Los narcoterroristas intentaron disimular la droga como carbón vegetal a través de procesos químicos.

Uno de los detenidos fue identificado como Néstor Enrique Guzmán Reyes, de 55 años, a quien se lo conoce como "El Químico". Él era el encargado del laboratorio clandestino que habían montado en una pequeña chacra que compraron en la zona de Ñuatí Guazú, distante unos ocho kilómetros del casco urbano de la ciudad de Yaguarón, departamento de Paraguarí.

Los otros dos detenidos fueron identificados como Armando del Cristo Tejada Guerrero, de 75 años; y José Reinaldo Guzmán Reyes, de 57, también colombianos. Estos últimos serían los encargados de generar los contactos con enlaces locales en la zona de Triple Frontera con personas que las autoridades paraguayas sospechan cercanas a organizaciones investigadas por operar financiera e ilegalmente en favor de grupos islamistas de Oriente Medio.

Esas operaciones de lavado de activos incluyen el envío de grandes cantidades de droga a Siria, donde el valor actual de la cocaína oscila entre los 70.000 a 80.000 dólares estadounidenses el kilogramo. Al continuar la investigación y luego de las detenciones, según informaron los voceros de la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD), se cree que la droga con destino a Siria es fraccionada allí y el destino final para su posterior distribución sería el Líbano.

De acuerdo con los investigadores, la presencia de los narcos colombianos fue detectada en Paraguay hace dos años por sus actividades comerciales con personajes allegados a empresas sospechadas de operar para la organización político-terrorista libanesa pro-iraní Hezbollah, el grupo está acusado de ser el autor material del atentado contra la sede de la AMIA en Buenos Aires en 1994.

Hezbollah está incluida en la lista de organizaciones terroristas de EEUU e Israel, entre otros países. Tanto los colombianos detenidos, como las compañías y oficinas de las empresas, están siendo investigadas por actividades de narcotráfico y lavado de activos. Sin embargo, los tres narcos colombianos se habían instalado en la zona de Yaguarón recién en enero pasado.

Desde el lugar comenzaron a realizar gestiones para crear una empresa exportadora -supuestamente- de "carbón vegetal", la cual iban a utilizar para efectuar los envíos a Latakia, Siria, sobre la costa del Mar Mediterráneo.

En ese momento es que los agentes de la SENAD detectaron las actividades de los narco-terroristas e infiltraron a un hombre de la seguridad paraguaya en la organización criminal. El agente simuló ser un ejecutivo capaz de montar la empresa con todos los contactos necesarios para realizar las exportaciones a Siria y gano la confianza de los colombianos, así se los pudo detener.

Según las fuentes, el agente infiltrado en la organización pudo averiguar que Guzmán tenía la fórmula para simular la droga como carbón, utilizando para esa tarea varios productos químicos altamente tóxicos, como la brea anti-humedad y el agregado de polvo de carbón vegetal, entre otros.

Con la información que fue proporcionando el infiltrado a sus mandos superiores, se conoció que Guzmán aseveraba que "con ese proceso no había forma posible, ni examen químico capaz de detectar la droga". Sin embargo, únicamente él manejaba la formula, por lo que debía acompañar los envíos para poder supervisar el proceso y, de esa forma, obtener nuevamente una cocaína pura para ser comercializada y distribuida en el país donde era enviada.

A decir de las fuentes de la seguridad, el primero de los cargamentos de prueba debía ser un envío de 30 kilos. Si la "cocaína negra" llegaba a destino, iban a enviar entre 200 y 300 kilos por mes. Mas allá de la sorpresa por la modalidad de camuflar la droga, no es nuevo el intento por encubrir la cocaína como carbón vegetal, la "cocaína negra", como se la conoce en la jerga de las fuerzas de seguridad y anti-narcóticos ya había sido detectada anteriormente en Colombia y Perú.

La investigación continúa por estas horas y podría tener ramificaciones que conectan el accionar de los narcotraficantes con conocidas personalidades de la zona de Triple Frontera relacionadas de forma directa con el lavado de activos por el que recientemente han sido detenidas varias personas del clan Barakat.

Uno de los mas célebres de ese grupo es Assad Barakat, quien había tenido un pedido de detención de la justicia argentina en el 2006, pero aun así, entró a la República Argentina 332 veces desde el año 2012 hasta 2018, y lavó 10 millones de dólares en un casino de Puerto Iguazú.

Los registros de viajes indican también que viajaba una vez al año al Líbano, Siria e Irán y que ha sido un elemento clave en los aspectos de financiación y recolección de dinero para Hezbollah desde Latinoamérica. El llamado clan Barakat está compuesto por mas de una docena de personas involucradas en los delitos de falsificación de documentos, dinero y marcas, contrabando de ropa y cigarrillos, extorsión, tráfico de drogas, armas y financiación del terrorismo.

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