La brutal represión del régimen de Daniel Ortega dejó más de 260 muertos en más de tres meses de protestas. Sin embargo, la población resiste y mantiene las manifestaciones. Este jueves miles de nicaragüenses se movilizaron en una marcha denominada "Juntos somos un volcán" para exigir la renuncia del presidente.
La marcha se inició de forma pacífica en la Rotonda Cristo Rey, ubicada cerca del centro de la capital nicaragüense y se dirigió hacia la Rotonda Jean Paul Genie, en el sureste de la ciudad.
"Estamos aquí para luchar por una causa, que es la libertad de nuestro país, el pueblo de Nicaragua está cansado de la historia dictatorial", manifestó a la agencia EFE la joven Valentina Trejos, mientras caminaba con una bandera roja, que "simboliza la represión contra nuestros hermanos caídos", explicó.
En la marcha participaron personas de distintas generaciones, como una abuela que se identificó como Rosa: "Marcho por mis hijos, mis nietos, por una Nicaragua libre".
"Así es esto, se va sumando gente, vamos a seguir aquí por la justicia y la democracia", señaló el presidente de la Unión de Productores Agropecuarios de Nicaragua (Upanic), Michael Healy, antes del inicio de la marcha, que arrancó una vez que los manifestantes entonaron el himno nacional nicaragüense.
"El pueblo unido jamás será vencido", es una de las canciones de protesta que se entonó una y otra vez.
Consignas como "¡Eran estudiantes, no eran delincuentes!", en referencia a los primeros fallecidos durante la represión, eran continuamente repetidas en la marcha, a la que muchos acudieron con los rostros tapados, para evitar ser agredidos por los seguidores del régimen al regresar a sus casas.
Los nicaragüenses también portaron pancartas con las leyendas "Protestar es mi derecho, reprimir es un delito", "Porque queremos justicia y democracia", "Hemos aguantado, pero ya explotamos", entre otras.
Este es el primero de tres días de protestas multitudinarias contra Ortega y se espera que otras marchas se realicen en diferentes municipios de Nicaragua en lo que resta del día.
Organismos de derechos humanos señalan que 351 personas fueron asesinadas en la represión. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en tanto, este miércoles registró 264 caídos en los más de tres meses de protestas.
La Policía Nacional informó este jueves que tres jóvenes fueron capturados con municiones de fusil AK, de fabricación rusa, y serán acusados por varios delitos, entre ellos "terrorismo".
Los jóvenes fueron capturados la tarde de ayer miércoles en el municipio de Nindirí, a 23 kilómetros al sureste de Managua, en un automóvil que, al "registrarlo, se encontró en su interior 4 magazines (paquete de municiones), 113 proyectiles de bala viva, 20 proyectiles de salva, todos de fusil AK", describió la Policía Nacional en un comunicado.
Los acusados, todos nicaragüenses, fueron identificados como Hansel Manuel Vásquez Ruiz, de 25 años, Marlon Fonseca, de 26 años, y Kevin Rodrigo Espinoza Rodríguez, de 21 años.
"Serán remitidos a las autoridades del Ministerio Público por los delitos de terrorismo, crimen organizado y posesión ilegal de municiones", sostuvo la Policía.
Con información de EFE
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