Un testigo que trabajó para un grupo paramilitar declaró ante la Policía brasileña que un edil y un miliciano planearon el asesinato de la concejal de Río de Janeiro Marielle Franco, muerta a tiros el pasado 14 de marzo, según publicó este martes el diario O Globo.
El delator, cuyo nombre no fue divulgado, implicó al concejal Marcello Siciliano, del Partido Humanista de la Solidaridad (PHS), y a Orlando Oliveira de Araújo, un ex policía que está preso acusado de comandar una milicia en la zona oeste de Río, señaló el tabloide en su versión web en la noche de este martes.
En tres declaraciones al Departamento de Homicidios de la Policía Civil de Río, el testigo dio informaciones sobre "fechas, horarios y hasta locales de reuniones entre el edil y el miliciano", que hoy cumple una pena en una cárcel de Río, indicó el rotativo.
El periódico, que tuvo acceso a esas declaraciones, también señaló que el testigo "dio detalles de cómo, según él, fue planeada" desde junio del año pasado "la ejecución" de Franco.
En declaraciones a O Globo, Siciliano dijo que no conoce a Orlando Oliveira y afirmó que se trata de una "noticia totalmente mentirosa".
Militante del izquierdista Partido Socialismo y Libertad (PSOL) y activista de derechos humanos, Franco fue asesinada a tiros junto con su conductor el pasado día 14 de marzo, cuando circulaba en un vehículo por una calle del centro de Río tras haber participado en un acto político.
En el testimonio, el delator contó, a cambio de protección, haber presenciado por lo menos "cuatro conversaciones" entre el político y el antiguo agente, que, hoy pese a estar preso, sigue al parecer al frente de la milicia.
También reveló los nombres de cuatro individuos que habrían sido seleccionados para cometer el asesinato de Franco, de 38 años, socióloga de profesión y la quinta legisladora más votada en las elecciones de 2016 para el Concejo de Río de Janeiro.
Afirmó además que presenció en junio del año pasado un encuentro entre el edil y el ex policía, entonces en libertad, pues solo sería detenido en octubre pasado, en un restaurante de Río y que escuchó a ambos hablar sobre la concejala, según 'O Globo'.
"Yo estaba en una mesa, a una distancia de poco más de un metro de los dos. Estaban sentados en una mesa al lado. El concejal habló alto: 'Tienes que ver la situación de Marielle. La mujer me está molestando (…) Necesitamos resolver eso pronto'", afirmó el testigo, según citó el diario.
La Policía no ha identificado ni detenido, por el momento, a ningún sospechoso, e investiga la posible participación de milicias en este crimen que conmocionó Brasil y fue condenado por diversos organismos internacionales.
El asesinato de la concejala se produjo en medio de la intervención militar decretada por el Gobierno brasileño en el área de seguridad del estado de Río de Janeiro, que dejó en manos de las Fuerzas Armadas el control del orden público con objeto de frenar la ola de violencia que atraviesa la región.
(Con información de EFE)
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