Marcelo Odebrecht, el empresario brasileño condenado a 19 años de prisión por el pago de sobornos en el marco de la investigación conocida como Operación Lava Jato, dijo que mientras más investiga en sus archivos personales y correos electrónicos más complicada queda la situación del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Condenado a 12 años de prisión por corrupción y detenido el sábado en San Pablo, Lula está acusado de recibir sobornos, específicamente un departamento en esa misma ciudad, de la Organización Odebrecht. Aunque existen otros procesos abiertos.
"Cuanto más reviso los archivos, más se complica la vida de Lula", dijo Odebrecht, quien cumple arresto domiciliario y fue interrogado a pedido de la defensa de Lula, según informó el periódico O Globo, en el marco de una causa que investiga si Odebrecht pagó por un edificio destinado al Instituto Lula, como un soborno para el líder petista.
Los abogados de Lula se quejaron por haber recibido solo una selección de los e-mails enviados por el arrepentido Odebrecht, quien logró salir de prisión tras ofrecer su confesión e información sensible que pudiera ayudar en las investigaciones, y retenidos por la Justicia.
De esta manera, Odebrecht analizó 600.000 documentos de sus archivos, tras lo cual anexó este año a la causa un número de correos electrónicos que datan de la época de las negociaciones por el terreno y el edificio, informó Folha de Sao Paulo.
En consecuencia, el juez Sérgio Moro habilitó a la defensa a acceder al archivo completo y a poder agregar nuevos contenidos hasta el 30 de abril.
Con respecto al proceso en sí en torno al edificio del Instituto Lula, el empresario señaló el miércoles que fue comprado por la empresa DAG, subcontratada por Odebrecht para ese fin.
"La cabeza del proceso, desde el inicio, era que DAG compraría el terreno, construiría y luego vendería o alquilaría al Instituto Lula. La compañía sería resarcida después por la donación que se haría (por parte de Odebrecht) al Instituto, y el Instituto compraría", explicó Odebrecht ante el juez Sérgio Moro.
Lula se encuentra en una prisión en Curitiba luego de que la semana pasada el Tribunal Supremo Federal rechazara un habeas corpus y confirmara la sentencia de 12 años en su contra. Tras vencerse el plazo inicial para su entrega, el líder del Partido de los Trabajadores (PT) se puso a disposición de la Justicia el sábado.
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