Un total de 83 candidatos a los comicios municipales de este domingo en Brasil fueron arrestados en las primeras horas de votación por diferentes violaciones a la legislación electoral, informó el Tribunal Superior Electoral en un balance sobre problemas en la jornada.
De los detenidos por la Policía, 61 estaban haciendo proselitismo político dentro de los colegios electorales y el resto distribuía material propagandístico en lugares prohibidos, según un boletín divulgado por la autoridad electoral.
Otros 66 candidatos a alcalde o concejal fueron amonestados por insistir en hacer campaña sin que llegaran a ser detenidos.
El tribunal informó igualmente que 575 votantes también fueron detenidos por violaciones a la ley electoral, principalmente por hacer proselitismo en los lugares de votación, y que se registraron otros 686 incidentes con electores en los que no hubo prisión.
Proselitismo político dentro de los colegios electorales y distribución de material propagandístico en lugares prohibidos, fueron los motivos de las detenciones
Entre los electores arrestados se registraron algunos casos de compra de votos y transporte ilegal de votantes.
Según el balance, las autoridades electorales han tenido que sustituir hasta ahora 2.331 urnas electrónicas por diferentes fallas, lo que representa el 0,53 % de las 432.959 distribuidas en todo el país.
En su primera rueda de prensa para referirse a la jornada electoral, el presidente del tribunal, Gilmar Mendes, aseguró que la votación ha sido tranquila en todo el país aunque se registraron algunos casos puntuales de violencia.
"La votación está ocurriendo en paz. Sobre los incidentes graves, dimos las respuestas adecuadas con las fuerzas de seguridad, que están actuando donde es necesaria una acción mas ostentosa", afirmó.
Según Mendes, pese a que entre la noche del sábado y la madrugada del domingo se registraron algunos casos de violencia en Sao Luis, la llegada de militares consiguió garantizar la paz y la seguridad durante la jornada electoral en la capital del estado de Maranhao.
Tanto el presidente del Tribunal Electoral como el ministro de Defensa, Raúl Jungmann, viajaron el sábado a Sao Luis para adoptar personalmente medidas para garantizar la seguridad durante las elecciones tras dos noches consecutivas de ataques a autobuses y a escuelas en que funcionan colegios electorales.
Pese a que la presencia de los soldados redujo sensiblemente la violencia, en la madrugada de este domingo desconocidos le prendieron fuego a salas de dos escuelas públicas en que habían sido instalados colegios electores y el fuego destruyó una de las urnas.
Las autoridades regionales atribuyen los ataques a una reacción de jefes de grupos criminales que están presos a la decisión del gobierno regional de transferir a los más peligrosos a un presidio de máxima seguridad en otro estado.
El caso más grave de violencia durante las elecciones hasta ahora se registró en Angra dos Reis, municipio del estado de Río de Janeiro, en donde las urnas de un colegio electoral tuvieron que ser transferidas a otro luego de un tiroteo que asustó a los electores, destruyó un transformador y dejó sin luz el lugar.
Unos 144 millones de electores están convocados para renovar los alcaldes y concejos municipales en los 5.558 municipios del país.
Las elecciones de este domingo renuevan el mapa político municipal del país tras la decisión del Congreso de destituir el pasado 31 de agosto a Dilma Rousseff como presidenta de Brasil, tras juzgarla por irregularidades fiscales, y de sustituirla por Michel Temer, quien era su vicepresidente.
Con información de EFE