Una árbitra dirigirá por primera vez un partido de la liga masculina de Portugal

Guardar

Lisboa, 27 mar (EFE).- Catarina Campos será la primera árbitra que dirigirá un partido de la liga masculina de fútbol de primera división de Portugal, este fin de semana, el encuentro entre Casa Pia y Rio Ave de la jornada 27 de la competición.

Campos estará asistida por Andreia Sousa y Vanessa Gomes en el encuentro que se disputará el sábado a las 15.30 hora local (misma hora GMT) entre el séptimo y el undécimo equipos de la clasificación de la liga lusa.

Fábio Veríssimo será el cuarto árbitro y el VAR estará formado por André Narciso y Nuno Pires.

Para el presidente de la Asociación Portuguesa de Árbitros de Fútbol (APAF), José Borges, este hito "simboliza el progreso, la igualdad y el reconocimiento del talento del arbitraje femenino en Portugal".

"Este nombramiento refleja el excelente trabajo realizado a lo largo de los años en el fútbol femenino y la creciente valoración de nuestras árbitras, que demuestran, partido tras partido, competencia, dedicación y profesionalidad. La APAF cree que este nombramiento inspirará a las nuevas generaciones de nuestros árbitros", agregó Borges, citado en las redes sociales de la asociación.

El pasado 15 de febrero Campos ya hizo historia al convertirse en la primera mujer en arbitrar en competición profesional de fútbol masculino en el enfrentamiento entre el Feirense y el Paços de Ferreira, de la Segunda División.

Para ese juego también formó equipo con Andreia Sousa y Vanessa Gomes.

Natural de Viseu y de 39 años, Catarina Campos es internacional desde 2018 y forma parte de la categoría de élite de la UEFA desde hace cerca de un año y medio.

En 2023 se convirtió en el primer árbitro del mundo en mostrar durante un partido una tarjeta blanca, una iniciativa pionera de Portugal que pretende no solo revolucionar, sino también valorar el juego limpio en el deporte.

Durante un derbi femenino entre Benfica y Sporting de Portugal, un aficionado se sintió indispuesto en la grada y los equipos médicos de los dos grandes de Lisboa dejaron a un lado su histórica rivalidad y unieron fuerzas para asistirle. El ejemplo de deportividad fue recompensado por Campos, que sacó la tarjeta blanca a los sanitarios de ambos clubes. EFE