Un Manchester City entre el juicio y la reconstrucción

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Manuel Sánchez Gómez

Londres, 31 ene (EFE).- La eliminatoria de Liga de Campeones entre el Real Madrid y el Manchester City tiene un trasfondo sombrío que apunta al juicio de los ingleses con la Premier League, el más importante en la historia del club inglés.

Los de Pep Guardiola, sin embargo, son más que optimistas respecto a la resolución del caso, la cual se espera para antes de que acabe la temporada, pero sin una fecha concreta.

Más allá de defender su inocencia en repetidas ocasiones, el City ha demostrado su confianza en el veredicto mediante tres movimientos muy concretos.

El primero llegó en noviembre, escasos días antes de que el juicio celebrado en Londres a puerta cerrada se acabara: la renovación de Guardiola. El técnico español estará en el Etihad Stadium hasta, por lo menos, el verano de 2027. Este fue un alegato de fuerza y de energías de seguir respecto a otros entrenadores como, por ejemplo Jürgen Klopp, que se declararon agotados tras la guerra continua que es la Premier League.

El español estampó su firma en el nuevo acuerdo antes de dar paso a su peor racha en el club, la que le ha apartado de luchas por su quinta Premier consecutiva, le ha eliminado de la Copa de la Liga (por cuarto año seguido) y le tuvo fuera de la decisión por el título en la 'Champions' hasta cuarenta minutos antes de la finalización de la fase liga.

La tarea de Guardiola ahora es la de reconstruir un equipo que él pensaba aún tenía la calidad para seguir llevándose títulos por doquier. Por eso declinó fichar el pasado verano y sólo reclutó a Savinho y Gündogan: una promesa inmersa ya en el entramado del City Group y una oportunidad de mercado, respectivamente.

"Me equivoqué", reconoció el técnico de Sampedor ante la catarata de lesiones (quince jugadores se han perdido dos semanas o más de competición), por lo que el City tuvo que recurrir a un mercado invernal que apenas había tocado desde que Guardiola llegó en 2016.

La única transición de peso fue el traspaso en enero de 2018 de Aymeric Laporte, que llegó del Athletic Club de Bilbao previo pago de su cláusula.

Este enero, el City se ha dejado 124 millones de libras (más de 148 millones de euros) en los traspasos de Omar Marmoush (60), Vitor Reis (30) y Abdukodir Khusanov (34), todos ellos menores de 25 años y que apuntan al futuro de un club que no parecería estar muy preocupado por sanciones deportivas, como pérdidas de puntos y descensos a divisiones inferiores del fútbol inglés.

Además, estos tres jugadores, que no pudieron participar en los dos últimos partidos de la fase liga, sí estarán disponibles para la eliminatoria contra el Real Madrid. Khusanov y Reis seguramente tengan un rol muy secundario y ni jueguen, por su inexperiencia en estos duelos, mientras que Marmoush sí puede tener algún papel como suplente.

La tercera gran operación hecha por el City en estas semanas es, quizá, la más sorprendente, por la forma de la misma. Renovar a Erling Haaland era lógico, tras los dos espectaculares años que ha firmado, con 114 goles en 130 encuentros, pero nadie esperaba que el acuerdo fuera de diez años, hasta 2034.

El noruego, que cobra ahora cerca de 600.000 libras semanales (unos 718.000 euros), ha blindado su carrera con uno de los contratos más largos de la historia del fútbol y que reafirma su confianza y la de la directiva en que el juicio por las 130 irregularidades financieras no supondrá un castigo tan grande como podía preverse en un inicio, cuando se especulaba con una pérdida de puntos, de categoría, una multa económica o la pérdida de títulos.

El City fue acusado en febrero de 2023 por la Premier League de haber cometido 115 irregularidades financieras (incrementadas a 130 por tecnicismos) entre 2009 y 2018. Entre los supuestos delitos se incluye la no entrega de documentación financiera correcta, no haber dado detalles exactos de los pagos a jugadores y entrenadores, romper las reglas financieras de la UEFA y la FIFA y no haber cooperado con las investigaciones que comenzaron en 2018.

Una vez acabado el juicio, que duró diez semanas e involucró a algunos de los mejores abogados deportivos de Inglaterra, no queda sólo esperar el veredicto, sino también las posibles apelaciones que alarguen esto hasta la próxima temporada.

Cuando el City fue sancionado por la UEFA sin poder competir dos años en Europa, este acudió al Tribunal de Arbitraje Deportivo y consiguió que la sanción se quedara en una multa. Sin embargo, esta vez no podrá repetir, ya que la Premier no reconoce al TAD y, en caso de apelación, deberá recurrir a un tribunal londinense. EFE