La Paz, 7 ene (EFE).- Los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Bolivia elegidos recientemente por voto popular se comprometieron este martes, durante el acto de inauguración del año judicial, a trabajar "de manera inmediata" para tener "una justicia independiente" en el país.
"Hoy hemos jurado ante el señor Jesucristo mantener la independencia judicial. Una justicia independiente es la que le va a servir al pueblo boliviano, la justicia no debe estar sometida a ningún tipo de poder, ni económico, ni político", afirmó el nuevo presidente del TSJ, Romer Saucedo, en el acto llevado a cabo en la ciudad de Sucre, capital constitucional del país y además sede del Órgano Judicial.
Saucedo llamó a los jueces a "ser imparciales" y actuar bajo el sometimiento único a la Constitución Política del Estado (CPE) y las leyes.
"Esta gestión se va a caracterizar por eso, por el sometimiento estricto a lo que dice la Constitución y las leyes en vigencia", precisó el presidente del TSJ.
El pasado 15 de diciembre se llevaron a cabo las elecciones judiciales parciales para elegir a los magistrados del TSJ, del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), Tribunal Agroambiental y el Consejo de la Magistratura, después de un proceso accidentado, retrasado un año y politizado por la prórroga de funciones de los magistrados del Constitucional.
El sistema judicial en Bolivia ha sido criticado por la población, políticos y profesionales debido a fallos marcados por la corrupción, politizados y por procesos burocráticos lentos.
El exmagistrado José Antonio Rivera dijo recientemente a EFE que la crisis judicial no se solucionará con los comicios realizados, sino que tiene que existir "un acuerdo nacional por una voluntad genuina de garantizar el Estado constitucional y seguridad jurídica con reformas radicales".
Por su parte, el presidente del TSJ afirmó que no todos los jueces "son malos".
"Hay muchos jueces y vocales buenos en todos los departamentos, que se han esforzado por aportar su conocimiento y el compromiso de estos siete magistrados es trabajar de manera coordinada y sin intereses personales más que una justicia mejor para el país", remarcó.
Saucedo afirmó que los nuevos magistrados tienen el objetivo de transformar el sistema actual a uno más "amigable" con la población y a digitalizar los procesos judiciales.
En las elecciones judiciales de diciembre, por primera vez la cantidad de votos válidos alcanzó el 64,29 % mientras que los votos blancos y nulos fueron el 35 %, lo que contrastó con las elecciones celebradas en 2011 y 2017 cuando los votos útiles fueron menores.
Sin embargo, la elección se realizó de manera parcial a raíz de un fallo constitucional que declaró desierta la convocatoria en algunas regiones del país después de valorar los recursos que presentaron algunos postulantes que no fueron seleccionados por el Legislativo.
Por esto solamente fueron elegidos 19 de los 26 magistrados titulares y suplentes de las altas cortes bolivianas y queda pendiente completar los cargos restantes en una votación complementaria.
Las magistraturas no renovadas están ocupadas por los jueces que se eligieron en los comicios de 2017 y que a finales del año pasado extendieron sus funciones tras una polémica decisión que fue cuestionada por la oposición y la facción del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) leal al expresidente Evo Morales (2006-2019).
Está en manos del Parlamento la aprobación de una ley para la realización de una "elección complementaria" para designar los siete puestos del TSJ y el TCP que aún ocupan los magistrados que prorrogaron sus funciones.EFE