Seúl, 6 ene (EFE).- El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, dijo este lunes en Seúl que considera que Rusia está dispuesta a compartir tecnología avanzada satelital y aeroespacial con Corea del Norte a cambio de la provisión de armamento y otros equipos por parte de Pionyang para apoyar la invasión de Ucrania.
"Tenemos razones para creer que Moscú tiene la intención de compartir tecnología espacial y satelital avanzada con Piongyang", dijo Blinken en una rueda de prensa conjunta tras haberse reunido con su homólogo surcoreano, Cho Tae-yul.
"Putin puede estar a punto de revertir una política que ha durado décadas al reconocer la legitimidad del programa de armas nucleares de la República Popular Democrática de Corea (nombre oficial de Corea del Norte)", añadió el secretario de Estado.
Blinken consideró que esté asunto es capital, "no solo para los Estados Unidos", sino también para sus dos principales aliados de Washington en la región, Corea del Sur y Japón.
Corea del Norte ha apoyado desde hace más de un año a Rusia con el envío de armamento y de tropas para apoyar la campaña de Moscú en Ucrania
Coincidiendo con la visita de Blinken, Corea del Norte lanzó hoy mismo un misil balístico, el primer ensayo de este tipo en dos meses, una acción que tanto el secretario de Estado como Cho condenaron durante su encuentro.
Sin embargo, el lanzamiento parece quedar en cierta medida en segundo plano en un momento en el que Pionyang ha dado la espalda al diálogo mientras fortalece enormemente su cooperación militar con Moscú.
También por la gran convulsión política en Corea del Sur tras la destitución del presidente, Yoon Suk-yeol, a cuenta de su fallido intento de imponer la ley marcial el pasado 3 de diciembre.
Los vaivenes sobre la posibilidad de que Yoon sea arrestado (la orden que han obtenido las autoridades para detenerlo e interrogarlo caduca en unas horas) incrementa además esa incertidumbre en un momento marcado también por la próxima llegada a la Casa Blanca de Donald Trump.
Al igual que hizo durante su encuentro con el presidente interino surcoreano, Choi Sang-mok, Blinken subrayó durante su encuentro con Cho que Washington tiene "plena confianza" en la democracia surcoreana y en el actual Gobierno en funciones del país asiático.
Esta es la última visita de Blinken como secretario de Estado a Corea del Sur antes del relevo de poder en Washington, un viaje que muchos consideran que busca reafirmar la base institucional de la cooperación bilateral antes de que Trump jure el cargo el 20 de enero.
El republicano no solo ha amenazado con exigir mucho más dinero a Seúl por la presencia de tropas estadounidenses en su territorio, sino que podría optar por implementar aranceles a las exportaciones surcoreanas -lo que haría un daño tremendo a la cuarta economía de Asia, que depende en más de un 40 % del sector exterior- y por activar una guerra comercial abierta que igualmente perjudicaría mucho a Corea del Sur. EFE