Islamabad, 3 ene (EFE).- El Ejército de Pakistán aceptó indultar a 19 de los 85 civiles condenados el mes pasado por un tribunal militar por su implicación en las protestas violentas del 9 de mayo de 2023 que tuvieron lugar en este país asiático, alegando razones humanitarias.
En diciembre, un tribunal militar condenó a penas de entre dos y diez años de prisión a 85 civiles pertenecientes al Pakistan Tehreek-e-Insaf (PTI), el partido político del ex primer ministro paquistaní Imran Khan, hoy encarcelado.
Primeramente, la justicia castrense condenó a 25 civiles, días después, amplió las condenas a 60 civiles en un proceso celebrado sin acceso al público ni a los medios de comunicación.
La Unión Europea, EEUU y Reino Unido cuestionaron la primera condena en declaraciones separadas, diciendo que carecía de transparencia y de escrutinio independiente, y que socavaba el derecho a un juicio justo.
En un comunicado fechado el jueves, pero publicado este viernes, el ala de prensa del poderoso Ejército paquistaní, el Servicio de Relaciones Públicas Interservicios (ISPR, por sus siglas en inglés), dijo que 67 de los condenados habían presentado peticiones de clemencia
El ISPR informó de que 48 de estas peticiones habían sido procesadas ante tribunales de apelación mientras que 19 habían sido directamente aceptadas por razones humanitarias.
Según la ley paquistaní, una persona condenada por un tribunal militar en este país presenta una petición de clemencia al jefe del Ejército y, si es rechazada, puede volver a presentarla ante un tribunal superior no militar y luego ante el Tribunal Supremo de Pakistán.
Las peticiones de clemencia restantes se decidirán más adelante, siguiendo el proceso legal indicado, especificó en su comunicado el ISPR.
El 9 de mayo de 2023, miles de partidarios del ex mandatario Khan protestaron en varios puntos de Pakistán por la detención del líder opositor, que finalmente fue liberado, aunque volvió a ser detenido y encarcelado definitivamente en agosto de ese mismo año.
Las manifestaciones de aquel día se volvieron violentas cuando varios correligionarios de Khan asaltaron instalaciones militares y gubernamentales, entre ellas la casa de un alto comandante militar en la ciudad oriental de Lahore. EFE