Cristina Cabrejas
Ciudad del Vaticano, 21 dic (EFE).- El Jubileo, la gran celebración católica que cada 25 años llama a los creyentes a una peregrinación a Roma, trasciende de acontecimiento espiritual para convertir la ciudad en la capital del mundo con los 32 millones de visitantes que se esperan. Pero Roma, ya de por sí caótica, ¿estará preparada?.
Los romanos, cansados de las obras del último año que han convertido su ciudad en una pesadilla con carreteras y calles cortadas y sus interminables consecuencias en el tráfico urbano o las huelgas continúas de transportes, no son muy optimistas y prevén "un gran caos".
El número de obras en Roma no tiene precedentes: 322 intervenciones, de las cuales 204 se definen como "esenciales e inaplazables", es decir, que deben estar listas en los plazos del Jubileo, con una financiación de hasta 4.300 millones de euros, algunos de los fondos jubilares y otros de las ayudas del Next Generation EU.
Como explican fuentes del Ayuntamiento de Roma, algunas de estas obras ligadas al Jubileo estarán listas para el inicio del evento, la apertura de la Puerta Santa de la basílica de San Pedro el 24 de diciembre, como el subterráneo de Plaza Pía, que une el Vaticano y Roma y ha permitido crear una amplia área peatonal convertida en la gran infraestructura símbolo del Jubileo, o la restructuración de estaciones de metro como la de Plaza de España.
Pero otras se irán concluyendo durante el año porque se trata de otro tipo de obras no vinculadas al Año Santo y financiadas con los fondos europeo. Romanos y peregrinos tendrán que convivir con ellas.
"Roma se está preparando no solo para asegurar la acogida de peregrinos y la gestión de grandes eventos, sino para remodelar la ciudad y hacerla más acogedora, más moderna, más inclusiva y sostenible. En Roma eran necesarias tantas obras y el beneficio es superior a los inconvenientes", aseguró el alcalde, Roberto Gualtieri, este viernes en una rueda de prensa en la sede de la prensa extranjera.
Según un informe de las asociaciones del sector Isnart y Unioncamere sobre el crecimiento de los flujos turísticos para el Jubileo de 2025: habrá 35 millones de llegadas de turistas, 105 millones de presencias, con un gasto de 16.700 millones de euros.
Por ello, el riesgo del alojamiento aparece entre los factores críticos, dadas las 400.000 camas de la capacidad actual de Roma y su ocupación media anual del 66%, explica la sociedad dedicada al turismo Sl&A.
Las estimaciones oficiales del Vaticano y el delegado de Gobierno de Roma confirman la cifra de 32 millones, con picos que corresponden a los grandes acontecimientos programados, con especial atención al "Jubileo de la Juventud", entre el 28 de julio y el 3 de agosto de 2025 y para el que se prevé más de un millón de chicos y chicas.
Otro tema importante será la seguridad, no sólo ante el riesgo ed actos terrorismo, sino también de la pequeña criminalidad como los carteristas. De hecho llegarán más de 700 agentes policiales de refuerzo para vigilar la zona del Vaticano y el centro histórico de Roma.
También se ha firmado un acuerdo con algunos sindicatos para evitar las huelgas de transportes en las fechas donde se espera más afluencia, pero no evitará que se sigan convocando parones que conllevan, por ejemplo, el cierre total durante varias horas de todas las líneas de metro.
Además, Roma ha comenzado la licitación para unas 1.000 licencias más de taxis, pero no todas estarán activas al inicio del Jubileo.
Pero las obras también son un 'lavado de cara' del enorme patrimonio y belleza artística de Roma. La Fontana de Trevi, tras la polémica pasarela obligada por las obras de limpieza, vuelve en todo su esplendor, así como las fuentes de la Plaza de la Rotonda, frente al Panteón, y las de Plaza Navona. En total 55 fuentes con una intervención de 11 millones de euros. EFE
(Recursos de archivo en www.lafototeca.com: Cod. 22459960, 22473097 y otros)