Jerusalén, 19 dic (EFE).- El ministro israelí de Defensa, Israel Katz, advirtió este jueves que atacarán "con fuerza" y que no van a permitir que continúe la situación de "disparos y amenazas", después de que esta madrugada el Ejército bombardease posiciones militares de los rebeldes hutíes en Yemen, quienes habían lanzado previamente un misil.
"Advierto a los líderes de la organización terrorista hutí: la larga mano de Israel también llegará a vosotros. Quien levante la mano contra el Estado de Israel, se le cortará la mano, quienquiera que ataque será perjudicado por siete", dijo Katz en un comunicado.
El principal portavoz militar de Israel, Daniel Hagari, precisó en un mensaje en vídeo que entre los objetivos bombardeados se encontraban puertos e infraestructuras energéticas en Saná, la capital yemení, así como la franja costera occidental y el interior de Yemen.
Por su parte, el presidente israelí, Isaac Herzog, agradeció en un mensaje "la tremenda capacidad y valentía" de la Fuerza Aérea de Israel para defenderlos de quienes "buscan aterrorizar a Israel y el Medio Oriente".
De acuerdo a la televisión yemení Al Masirah, portavoz de los rebeldes hutíes, Israel lanzó cuatro ataques aéreos contra el puerto de Al Hodeida y otros dos contra instalaciones petrolíferas de Ras Issa, informó Al Masirah.
Por otro lado, hubo otras cuatro acciones contra la central eléctrica de Heziaz, en el sur de la capital yemení, y otras dos contra la central eléctrica de Dhabhan, al norte de la capital, añadió.
Estos ataques tuvieron lugar después los hutíes lanzasen anoche un misil hacia territorio israelí, activando las sirenas antiaéreas en el centro de Israel. Tras la interceptación del misil, restos del proyectil causaron daños en una escuela en un barrio de la urbe de Ramat Gan, sin provocar heridos.
"Las circunstancias que rodearon el impacto están bajo revisión", dijo este jueves el Ejército en un comunicado castrense. EFE