Pekín, 19 dic (EFE).- El exlíder taiwanés Ma Ying-jeou inició este miércoles su visita a China en la ciudad nororiental de Harbin, donde se reunió con el jefe de la Oficina de Asuntos de Taiwán del Consejo de Estado (Ejecutivo chino), Song Tao, y pidió más "intercambios y cooperación" entre ambas orillas del Estrecho de Taiwán.
El expresidente isleño (2008-2016) enfatizó la importancia de "oponerse a la independencia de Taiwán" y de la cooperación para "promover el desarrollo pacífico de las relaciones entre ambos lados del Estrecho".
Asimismo, Ma, del partido opositor Kuomintang (KMT), exhortó a defender el conocido como 'Consenso de 1992', un supuesto acuerdo tácito entre Taipéi y Pekín para reconocer que "solo hay una China en el mundo", aunque que cada parte lo interprete a su modo.
Por su parte, Song transmitió a Ma y a la delegación que lidera "cordiales saludos" del presidente chino, Xi Jinping, al tiempo que pedía a los habitantes "de ambos lados del Estrecho de Taiwán" dar "prioridad a los intereses de la nación y al futuro del país", recogió este jueves la cadena estatal CGTN.
También instó a los pueblos "a trabajar juntos para mejorar las relaciones entre ambos lados del Estrecho, mantener la paz y la estabilidad en la región y perseguir el rejuvenecimiento nacional".
En este viaje, que se extenderá hasta el próximo 26 de diciembre, Ma encabeza una delegación de estudiantes para visitar las provincias chinas de Heilongjiang (noreste) y Sichuan (centro), en donde recorrerán sitios históricos y participarán en actividades culturales.
China y Taiwán vivieron un gran momento de acercamiento durante la presidencia de Ma, hasta el punto de que éste mantuvo un histórico encuentro en Singapur con Xi a finales de 2015, el primero entre líderes de ambos lados del Estrecho en más de 60 años.
Ma y Xi volvieron a reunirse en abril de este año en Pekín, durante la anterior visita del exlíder isleño a China. En aquella ocasión, el presidente chino insistió en que "no hay fuerzas que puedan separar a Taiwán de China".
Este viaje de Ma tendrá lugar en un contexto de crecientes fricciones entre China y Taiwán, una isla gobernada de forma autónoma desde 1949 y considerada por las autoridades de Pekín como una "provincia rebelde".
La semana pasada, Pekín desplegó múltiples buques de la Armada y la Guardia Costera en los alrededores de Taiwán y en distintos puntos del Pacífico, una operación sobre la que China no ha brindado detalles y que, según los expertos, buscaba "presionar" al Gobierno taiwanés y "enviar un mensaje" a la próxima Administración de Estados Unidos. EFE