Johannesburgo, 18 dic (EFE).- Los gobiernos de Mozambique y Sudáfrica anunciaron este miércoles una serie de medidas para preservar el comercio transfronterizo y mitigar los efectos de las protestas poselectorales en Mozambique en la economía.
Entre otras cuestiones, ambos países se comprometieron a aumentar la comunicación bilateral, identificar rutas alternativas y desplegar recursos adicionales para agilizar y facilitar el comercio, dijeron en un comunicado de prensa conjunto el ministro de Relaciones Exteriores y Cooperación de Sudáfrica, Ronald Lamola, y el titular mozambiqueño de Interior, Pascoal Ronda.
En una reunión en la localidad sudafricana de Malelane (noreste), próxima a la frontera con Mozambique, Lamola y Ronda acordaron estas y otras medidas para paliar las "perturbaciones" que las protestas poselectorales han causado en los pasos fronterizos, en concreto entre Lebombo (Sudáfrica) y Ressano Garcia (Mozambique), que ha permanecido cerrado durante días en varias ocasiones.
"Estas perturbaciones han tenido un impacto negativo significativo en las economías de ambos países y en la libre circulación de personas y mercancías entre nuestros dos países. Muchas empresas han sufrido pérdidas como consecuencia de la interrupción del comercio. Si la situación persiste, existe un gran peligro de inseguridad alimentaria y energética", destacaron ambos gobiernos.
En consecuencia, pactaron un mayor esfuerzo por "proteger y asegurar la infraestructura para facilitar el comercio y la colaboración continua para garantizar la mínima interrupción de la integración regional".
Para ello, Sudáfrica y Mozambique crearán un equipo técnico conjunto que asegure una mayor cooperación.
Mozambique vive una ola de protestas en rechazo a los resultados de las elecciones del 9 de octubre, en las que el candidato oficialista Daniel Chapo ganó con el 70,67 % de los votos, según los resultados provisionales de la Comisión Nacional de Elecciones (CNE), rechazados por los opositores y que debe confirmar el Consejo Constitucional.
Ese resultado permite mantenerse en el poder al Frente de Liberación de Mozambique (Frelimo), que dirige el país desde su independencia en 1975.
Desde el 21 de octubre, el candidato presidencial y líder de la oposición, Venâncio Mondlane, ha convocado jornadas de huelga general y movilizaciones contra las presuntas irregularidades y el asesinato de un abogado y de un dirigente del Partido Popular Optimista para el Desarrollo de Mozambique (Podemos), que lo apoyó en los comicios, si bien el candidato concurrió como independiente.
Las protestas han sido duramente reprimidas por las fuerzas de seguridad, lo que ha causado la muerte de al menos 130 personas, según el último balance de la organización mozambiqueña Centro para la Democracia y los Derechos Humanos (CDD) publicado este martes. EFE