Nueva York, 18 dic (EFE).- Un estudio publicado este miércoles en la revista científica Journal of Ethology revela que las ardillas terrestres de California, además de alimentarse de las semillas y otras partes de las plantas, también cazan, matan y comen "topillos", una especie de pequeño roedor.
Esta investigación, dirigida por la Universidad de Wisconsin-Eau Claire y la Universidad de California, Davis, es la primera que ha documentado ardillas californianas de todas las edades y sexos cazando y alimentándose de estos roedores, que son normalmente presas de halcones, búhos, coyotes y mofetas, entre otros animales.
La ardilla de tierra, un animal muy común en los parques y arboledas en Estados Unidos, es considerada una especie herbívora, que se alimenta normalmente de semillas de gramíneas y robles y de vegetación, como hojas, flores, tallos, brotes, raíces o ramas.
Sin embargo, el estudio ha documentado en 74 ocasiones a ardillas de tierra cazando y/o comiendo este tipo de roedores, un comportamiento que tuvo su punto álgido durante las dos primeras semanas de julio de 2024, cuando también hubo una proliferación de topillos en el Briones Regional Park (en el condado de ContraCosta).
De acuerdo con el artículo publicado en Journal of Ethology, titulado 'Caza de topillos: nuevo comportamieneto depredador y carnívoro de las ardillas terrestres de California', no se observó este mismo comportamiento con otros mamíferos.
"Nunca habíamos visto este comportamiento. (...) Esto nos dice que hay mucho más que aprender sobre la historia natural del mundo que nos rodea", indica una de las autoras principales, Jennifer E.Smith, profesora asociada de Biología en la Universidad de Wisconsin, en un artículo publicado por el centro.
Por su parte, Sonja Wild, que también ha dirigido la investigación, afirma que el hecho de que las ardillas tengan "un comportamiento flexible y puedan responder a los cambios en la disponibilidad de alimentos podría ayudarlas a permanecer en entornos que cambian rápidamente debido a la presencia humana".
Los expertos, que volverán a la zona de estudio el próximo verano , señalan que aún quedan muchas preguntas por responder, como hasta qué punto está extendida la caza entre las ardillas, si es algo que se transmite de padres a crías o cómo afecta a los procesos ecológicos. EFE