El Gobierno de Bielorrusia ha reclamado este lunes su espacio en una hipotética mesa de negociación entre Rusia y Ucrania a fin de poder defender sus propios "intereses", que pasan principalmente por "garantías de seguridad" a medida que continúan las "absurdas" acusaciones contra Minsk de participar en el conflicto.
"Bielorrusia ha tomado medidas para mantener la paz y evitar la escalada del conflicto y por eso, desde el principio, hemos afirmado que reclamaremos un lugar en la mesa de negociaciones de paz", ha adelantado el viceministro de Asuntos Exteriores, Yuri Ambrazevich, según recoge la agencia estatal de noticias, Belta.
Ambrazevich ha subrayado la "importancia" que supone para ellos contar con "garantías de seguridad", después de que durante todo el conflicto se haya señalado de manera "absurda" a Minsk de connivencia con la parte rusa. "Bielorrusia, más que nadie, está interesada en una rápida solución pacífica", ha dicho.
En ese sentido, ha destacado que esas acusaciones han empeorada la situación en sus fronteras y ha reclamado como "bastante razonable" el hecho de que ningún país quiera ver como sus lugares limítrofes "se ven envueltos en acciones armadas".
"No podemos evitar preocuparnos por que el actual conflicto armado en Ucrania ya se haya extendido al territorio ruso. Vemos que, debido a la difícil situación en el frente para las tropas ucranianas, existe una demanda cada vez mayor de una solución diplomática al conflicto", ha expuesto.