El coordinador humanitario de la ONU en Siria, Adam Abdelmouta, ha expresado este viernes su preocupación por la situación humanitaria en Siria tras la caída del régimen de Bashar al Assad, la cual ha calificado de "sombría", y ha pedido al grupo yihadista Hayat Tahrir al Sham (HTS), que lideró la ofensiva que tomó la capital, que mantenga la ley y el orden en el país.
"La Policía ha desaparecido desde que el HTS tomó el poder y ahora son las fuerzas del HTS las que mantienen la paz en todas las zonas que han sido tomadas del régimen anterior. Pero en general, a pesar de que se ve gente armada en las calles y la gente está nerviosa por eso, puedo decir que hay una apariencia de paz", ha declarado Abdelmouta, según ha publicado la ONU.
También ha subrayado que la situación humanitaria es "muy sombría": "Mi mayor temor es que con la paz y la estabilidad, al menos en partes importantes del país ahora, muchos refugiados que viven en países vecinos --Turquía, Líbano y Jordania-- puedan venir voluntaria o involuntariamente a Siria, y eso sólo agravará la situación humanitaria que ya es sombría".
Según los datos que ha vertido, durante la ofensiva que condujo al derrocamiento del régimen de Al Assad, hubo al menos 374.000 personas desplazadas.
"El país no está preparado en cuanto a la disponibilidad de servicios básicos. Hablamos de salud, educación, agua y saneamiento, infraestructura, vivienda. Esas necesidades básicas no están cubiertas ni siquiera para la gente que vive en el país, y mucho menos para una afluencia adicional que viene del exterior", ha apostillado.
LA IMPORTANCIA DE LA UNIDAD NACIONAL
El coordinador humanitario ha hecho un llamamiento a la unidad entre las facciones sirias. "Les hemos estado enviando mensajes consistentemente de que es necesario mantener la ley y el orden, es necesario que muestren inclusión ya que este es un país muy diverso".
"Si una facción o un pequeño número de facciones intentan excluir a las demás, eso podría llevar a nuevos combates e inestabilidad, y eso es lo último que Siria necesita. Por eso, siempre digo que el éxito de la transición depende de la capacidad de los líderes --todos los líderes-- de unirse y forjar un camino conjunto", ha enfatizado.
Abdelmoula también ha advertido sobre los efectos de los ataques aéreos israelíes en el país. Según fuentes israelíes públicas atribuidas por el coordinador, Israel afirmó haber llevado a cabo más de 500 ataques aéreos en Siria y haber destruido el 85 por ciento de las capacidades militares del país.
"Si bien las Naciones Unidas y sus activos pueden no haber sido un objetivo directo de estos ataques aéreos, tienen la consecuencia no deseada de no permitirnos llevar a cabo operaciones humanitarias normales por temor a que nos pillen en el momento y lugar equivocados. Además, crean una atmósfera de miedo entre la población", ha denunciado.
Aún así, ha insistido en enviar un mensaje a los sirios: "Mi mensaje a todos los sirios en este momento es que la unidad es un imperativo para el éxito de la transición. Siria es un país diverso desde el punto de vista étnico, religioso e incluso cultural, por lo que es muy importante que esta transición sea inclusiva".
La ofensiva en Siria, lanzada el 27 de noviembre desde la provincia de Idlib permitió a yihadistas y rebeldes tomar la capital y poner fin al régimen de la familia Al Assad, en el poder desde 1971 --primero con Hafez al Assad (1971-2000) y posteriormente con su hijo, Bashar--, ante un repliegue constante de las tropas gubernamentales, respaldadas por Rusia e Irán.