Policía canadiense busca a tres chilenos sospechosos de pertenecer a un grupo criminal

La Policía canadiense emitió órdenes de arresto contra tres chilenos fugados de un centro de detención, involucrados en el grupo criminal especializado en robos denominado South American Theft Group

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Toronto (Canadá), 9 dic (EFE).- La Policía canadiense informó este lunes que ha emitido órdenes de arresto contra tres ciudadanos chilenos, sospechosos de formar parte de un grupo criminal especializado en el robo de viviendas y que escaparon durante el fin de semana de un centro de detención de inmigrantes.

La Agencia de Servicios Fronterizos de Canadá (CBSA en inglés) identificó a los tres individuos como Bryan Ulises Moya Rojas, de 30 años; Diego Nicolas Flores Sepulveda, de 36; y Daniel Eliseo Gonzalez Ihrig, de 20.

Fuentes policiales consultadas por la radiotelevisión pública canadiense, CBC, indicaron que los tres individuos estaban ingresados en un centro de detención de inmigrantes en la localidad de Laval, en la provincia de Quebec, a la espera de ser deportados a Chile.

Las mismas fuentes señalaron que la Policía sospecha que los tres pertenecen a un grupo criminal al que han apodado South American Theft Group (SATG o Grupo Sudamericano de Robo) y está especializado en el robo de viviendas.

Medios de comunicación de Quebec han informado que SATG opera desde hace años en la provincia francófona y que está compuesto por individuos procedentes de Colombia, Chile, México, Perú y Venezuela, entre otros países.

Según las informaciones publicadas, los integrantes de SATG llegan a Canadá con pasaportes mexicanos e identidades falsas pero operan también en otros países.

El FBI estadounidense considera a ese grupo responsable de al menos 29 robos a bancos en los estados de California, Nevada, Nebraska, Colorado, Washington, Oregón, Texas y Arizona, entre otros.

A finales de octubre, las autoridades estadounidenses responsabilizaron a un grupo de SATG, en su mayoría compuesto de chilenos, de una serie de sofisticados robos a bancos en California en los que obtuvieron un botín de unos 2,5 millones de dólares estadounidenses. EFE