Las autoridades de Líbano han elevado este miércoles a más de 4.000 los muertos a causa de los ataques ejecutados por Israel desde el 8 de octubre de 2023, incluidos más de 3.400 desde la intensificación de la ofensiva contra el partido-milicia chií Hezbolá a mediados de septiembre.
El ministro de Sanidad libanés, Firas Abiad, ha señalado que hasta la fecha se han confirmado 4.047 fallecidos y 16.638 heridos, entre ellos 3.402 muertos y 14.655 heridos desde el 15 de septiembre, según ha recogido el diario libanés 'L'Orient-Le Jour'.
El balance ha sido publicado una semana después de la entrada en vigor de un acuerdo de alto el fuego con Israel, si bien el Gobierno ha denunciado diversas violaciones del mismo por parte del Ejército israelí, que ha asegurado que está aplicando el pacto y respondiendo a acciones de Hezbolá.
De hecho, al menos once personas murieron el lunes en Líbano a causa de bombardeos ejecutados por Israel en respuesta a un ataque con morteros por parte del partido-milicia. El grupo atacó una posición militar israelí tras las denuncias de la formación y de las autoridades libanesas sobre varios bombardeos por parte de Israel durante los últimos días.
Pese a ello, el portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, afirmó que el alto el fuego "se mantiene en general" y apuntó a "una dramática reducción de la violencia", si bien reconoció que se han registrado varias violaciones del mismo durante los últimos días.
Israel lanzó el 1 de octubre una nueva invasión de Líbano tras más de once meses de combates con Hezbolá en la frontera, al hilo de los ataques ejecutados el 7 de octubre de 2023 por Hamás y otros grupos palestinos, que dejaron cerca de 1.200 muertos y 250 secuestrados y llevaron al Ejército israelí a lanzar una cruenta ofensiva contra Gaza que deja ya más de 44.500 muertos y unos 105.000 heridos.