El presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) de Mozambique, Alacir Macassair, ha denunciado que las fuerzas de seguridad emplearon una fuerza excesiva contra los manifestantes durante las recientes movilizaciones convocadas por la oposición en rechazo a los resultados de las elecciones presidenciales y parlamentarias.
Macassair ha afirmado que los agentes lanzaron gases lacrimógenos de forma indiscriminada y usaron fuego real durante las protestas, al tiempo que ha cifrado en más de 70 el total de muertos por disparos efectuados por las fuerzas de seguridad, según ha informado la agencia estatal mozambiqueña de noticias, AIM.
Asimismo, ha dicho que algunos manifestantes también cometieron excesos y ha lamentado la muerte de agentes durante los enfrentamientos, así como los daños sufridos por instalaciones y edificios públicos y privados y la detención de personas por "ejercer su derecho" a la protesta.
"El uso de fuego real ha causado muertos entre personas desarmadas", ha explicado, al tiempo que ha recalcado que las armas de fuego "deben ser usadas de forma proporcionada, según las circunstancias". "Hay circunstancias que no lo justificaron", ha manifestado.
Por ello, ha reclamado a las fuerzas de seguridad que respeten el artículo 51 de la Constitución, "que contempla la libertad de manifestación y asamblea" y que apliquen la fuerza "de forma proporcional", al tiempo que ha pedido a la Fiscalía que investigue "rápidamente" cualquier abuso para que los responsables rindan cuentas.
Las declaraciones de Macassair llegan en medio de las denuncias de la oposición sobre el papel de las fuerzas de seguridad en la represión de las protestas y ante los esfuerzos infructuosos del presidente saliente, Filipe Nyusi, por sacar adelante un proceso de diálogo nacional para intentar acercar posturas y poner fin a la crisis.
Las tensiones aumentaron después de que la comisión electoral confirmara la victoria en las presidenciales de Daniel Chapo, candidato del gubernamental Frente para la Liberación de Mozambique (Frelimo), después de que Venancio Mondlane, uno de los líderes opositores, se autoproclamara vencedor y asegurara que era el presidente electo.
Los partidos de oposición de Mozambique que se presentaron a las presidenciales firmaron una declaración conjunta en la que denuncian irregularidades durante los comicios en favor de Chapo, después de que el Partido Optimista para el Desarrollo de Mozambique (Podemos) --que respaldó a Mondlane-- publicara un recuento paralelo que sostiene que el opositor recabó el 53,38 por ciento de los votos, por delante del 35,66 por ciento recabado por Chapo, al que la comisión electoral ha dado más del 70 por ciento de los respaldos.