Quito, 4 nov (EFE).- Las obras de ampliación del aeropuerto internacional Mariscal Sucre de Quito permitirán recibir hasta 7,5 millones de pasajeros anualmente, lo que supone un aumento del 38,8 % del flujo de viajeros actual, tras haber registrado en 2023 un total de 5,4 millones de visitantes.
Así lo anticipó este miércoles Ramón Miró, presidente y director general de Quiport, la empresa administradora de la infraestructura aeroportuaria, quien además compartió que el proyecto se encuentra en un 32 % de avance, por lo que se prevé que las nuevas áreas estén operativas para finales de 2025.
En concreto, esta ampliación comprende la construcción en cuatro niveles de diferentes espacios entre los que se encuentran una nueva sala de preembarque y arribo internacional, un aumento de la capacidad de los carruseles de equipaje, una reconfiguración del área de aduana, y unas 20 nuevas posiciones de chequeo para aerolíneas internacionales, entre otras medidas.
Estas nuevas zonas se unirán a las ya existentes gracias a una remodelación de la terminal actual que ocupará unos 3.000 metros cuadrados y que permitirá unificar los flujos de pasajeros, personal y demás servicios que ya incluye el aeropuerto con las futuras nuevas zonas.
Según explicó Diego Álvarez, gerente de diseño y construcción de la nueva infraestructura, la terminal contará con una nueva superficie de unos 17.000 metros cuadrados y una nueva plataforma de estacionamiento de unos 35.000 metros cuadrados que serán financiados con una inversión total de 74,2 millones de dólares.
Asimismo, este aumento del espacio completaría la creación de tres nuevas posiciones para aeronaves divididas en una primera destinada a modelos de fuselaje ancho (dos pasillos), que permiten transportar grandes cantidades de carga y pasajeros, y otras dos posiciones para modelos de fuselaje estrecho (un pasillo).
De cara a los próximos meses y en referencia a posibles cortes de luz -medida adoptada por el recrudecimiento de la crisis energética que atraviesa el país- que ralenticen las obras, Álvarez indicó que desde ya se han provisto de un generador de un megavatio dedicado a abastecer toda el área de la expansión con seguridad y durante todo el tiempo establecido.
Según comunicó Miró, actualmente esta ampliación produjo un total de 350 puestos de trabajo directos que se suman a los 8.000 que diariamente hacen funcionar el Aeropuerto Internacional.
"Estimamos que podemos afectar entre 35.000 y 40.000 trabajos (indirectos) todos los días, entonces todo lo que sea inversión y crecimiento va a aumentar ese número" reivindicó el máximo dirigente de la empresa encargada de la gestión de esta infraestructura.
De la misma forma, indicó que "el día de mañana, cuando esto (la ampliación) abra y opere, van a ser decenas de miles de trabajos que vamos a afectar positivamente".
A pesar de la marcha de diferentes firmas aéreas de la capital ecuatoriana, el presidente de Quiport confirmó que se encuentra en conversaciones "bastante avanzadas" con hasta tres aerolíneas para que comiencen a volar desde el aeropuerto Mariscal Sucre.
Miró afirmó que "la idea es vender las bondades de este bello país, tanto del lado de turismo como ojalá de inversiones el día de mañana" y así atraer "aerolíneas de primer nivel mundial".
Según argumentó Álvarez, este proyecto cuenta con la certificación EDGE en el plano ambiental, lo que acredita el compromiso con la sostenibilidad en el ahorro de energía, agua y materiales.
La recuperación del número de pasajeros el pasado 2023 a niveles incluso superiores a los registrados durante 2019 permitió la reanudación de las obras de ampliación contempladas en el Plan Director del Aeropuerto que tuvieron que ser paralizadas en 2020 por motivo de la pandemia de la covid-19. EFE
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