Opositora Alianza Socialdemócrata llega de favorita a legislativas anticipadas islandesas

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Copenhague, 29 nov (EFE).- La opositora Alianza Socialdemócrata llega como favorita a las elecciones legislativas anticipadas en Islandia de este sábado, en las que los sondeos apuntan a un descalabro para los tres partidos que gobernaron las últimas dos legislaturas en una coalición inédita hasta entonces entre ecologistas, conservadores y liberales.

El último sondeo difundido por el periódico Morgunblaðið sitúa a los socialdemócratas en cabeza con el 21,8 %, por delante del liberal Reforma con el 17,6 % y el conservador Partido de la Independencia del primer ministro, Bjarni Benediktsson ,con el 14,7 %.

Otras cinco fuerzas políticas -una de ellas, el Partido Socialista, por primera vez- entrarían en el Alþingi (Parlamento), según esta encuesta, que coloca por debajo de la barrera mínima del 5 % al Movimiento de Izquierda Verde, cuya antigua líder, Katrín Jakobsdóttir, ejerció de jefa de Gobierno desde 2017 hasta abril pasado.

Un estudio de opinión difundido también el miércoles por la firma Maskína ofrece un panorama muy similar, aunque reduce la distancia entre las dos primeras fuerzas a apenas un punto.

Si los pronósticos de los sondeos se confirman, sería la segunda vez desde que Islandia se separó de Dinamarca en 1944 en la que el Partido de la Independencia pierde unas elecciones generales.

La otra ocasión fue en 2009, en medio de la grave crisis económica que afectó al país, y los ganadores fueron los socialdemócratas, que desde 2013 hasta ahora han encadenado un fracaso electoral tras otro.

El debate sobre la Unión Europea resurge en Islandia

Tanto los socialdemócratas como Reforma son las dos únicas fuerzas claramente a favor del ingreso en la Unión Europea (UE), una cuestión que había quedado aparcada en los últimos años después de que el Gobierno de centroderecha retirase en 2015 la solicitud de ingreso presentada seis años antes por el anterior Ejecutivo de izquierda.

En Islandia, que pertenece al Espacio Económico Europeo (EEE), los partidarios de mantener al país fuera de la UE han sido tradicionalmente mayoría y sólo en medio de la mayor crisis económica del país, que arrasó con el sector bancario y provocó la caída del gobierno en el poder, se revirtió la situación.

Varios sondeos realizados en los últimos meses han vuelto a colocar por delante a los defensores del ingreso en la UE, pero sólo la líder de Reforma, Þorgerður Katrín Gunnarsdóttir, ha defendido abiertamente reanudar el proceso de ingreso de forma inmediata si llega al poder, mientras que la socialdemócrata Kristrún Frostadóttir se ha mostrado más cauta.

Ninguna de las encuestas recientes otorga mayoría suficiente a ambos partidos para gobernar juntos, por lo que necesitarían de al menos otra fuerza política en caso de que se cumplan los pronósticos.

Las discusiones políticas en la campaña electoral han girado también en torno a otras cuestiones como la política fiscal, el mercado de la vivienda y la sanidad.

La líder socialdemócrata ha defendido reducir el déficit público para controlar mejor la inflación y las tasas de interés, así como poner freno a la especulación inmobiliaria e invertir en el sistema de salud público.

Destinar más fondos a la sanidad también ha sido una reivindicación de Reforma, que quiere vender las participaciones que aún tiene el Estado en los bancos nacionalizados durante la crisis de hace década y media, mientras que los conservadores han insistido en su oposición a cualquier subida de impuestos.

Unos comicios anticipados por la ruptura de la coalición

Los comicios de este sábado llegan casi un año antes del fin de la legislatura y culminan una crisis iniciada en abril, cuando Katrín Jakobsdóttir anunció su dimisión para presentarse a las elecciones presidenciales de junio, en las que perdió contra la actual presidenta, la empresaria Halla Tómasdóttir.

La coalición de gobierno aparentemente contra natura de rojiverdes, conservadores y los liberales del Partido Progresista nacida tras el complicado panorama postelectoral de 2017 mantuvo el poder cuatro años después, con más apoyo, pero las tensiones internas fueron aumentando.

La salida de Katrín Jakobsdóttir provocó que Bjarni Benediktsson, que ya había sido primer ministro unos meses en 2017, asumiera la jefatura de Gobierno, pero las diferencias entre los socios en asuntos migratorios y en política energética hicieron que los rojiverdes anunciaran su salida de la coalición el mes pasado, lo que acabó provocando el adelanto de las elecciones.

Las autoridades de Islandia, una isla situada en el Atlántico Norte con cerca de 390.000 habitantes, han instado a los residentes en el este y el sureste del país a votar por anticipado ante las previsiones meteorológicas que apuntan a temporales de nieve para mañana en la zona. EFE

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