Roma, 28 nov (EFE).- La concejala de la ciudad italiana de Génova (norte) que denunció durante un pleno su violación, Francesca Ghio, explicó este jueves que ha recibido una llamada de la primera ministra, Giorgia Meloni, y le ha recriminado que si su interés es sincero "lo demuestre con una potente" política contra el machismo.
"Si verdaderamente la he emocionado, presidente Meloni, entonces lo demuestre con la potente acción política que está en sus manos. Es una responsabilidad y un privilegio poder usar la política para resolver los problemas. Las palabras ahora suenan vacías como la oscuridad que he cruzado", escribió Ghio en sus redes sociales.
La concejala genovesa, de 31 años, ha denunciado ante el pleno desde su escaño haber sido violada "física y psiologícamente" cuando solo tenía 12 años.
"Tenía 12 años, vivía en la Génova bien, tenía 12 años cuando fui violada física y psicológicamente dentro de los muros de mi casa, repetidamente durante meses por un hombre del que me fiaba y que nadie hubiera sospechado que fuera un monstruo", confesó.
En su denuncia pública, ya investigada por la Fiscalía, la edil apuntó a un "dirigente genovés, un bravo chico de los vuestros", sin dar más detalles sobre la identidad de su presunto agresor.
Tras la polémica suscitada por sus palabras, Meloni, primera mujer en ejercer de primera ministra en Italia, aunque ha optado por mantener el título de "presidente" en masculino, llamó a Ghio por teléfono para expresarle sus cercanía, según la propia afectada.
"Querida presidente Meloni, te agradezco la cercanía pero si he hablado no es para tener apoyo moral. Mi moral es sólida y de mis lágrimas se ocupan mis hermanas. Si he hablado es porque quiero que este dolor termine. Para que ninguna otra persona deba seguir pasando por él", escribió.
La política genovesa, del grupo 'Rossoverde' (Rojo-Verde), fue muy crítica con Meloni, al aseverar: "Si morí con 12 años es también por culpa de personas como usted, que aunque tienen el poder en sus manos, aunque tienen las herramientas para cambiar, eligen mirar hacia otro lado".
"Buscan continuamente un chivo expiatorio, quitando responsabilidades a las instituciones, culpando a cada persona para evitar resolver el problema y ocultándolo detrás de palabras retóricas", protestó.
La concejala aseguró que las soluciones existen, pero "hace falta voluntad política de aplicarlas" y reclamó el impulso de una "educación sexual afectiva, de las emociones y del consentimiento en todas las escuelas del país".
La Fiscalía de Génova ha abierto de oficio una investigación por un presunto delito de violencia sexual agravada, según recogen los medios. EFE