David Ramiro
Redacción deportes, 22 nov (EFE).- Los clubes deportivos han encontrado en las aerolíneas un compañero de viaje que les está reportando millones de beneficios más allá de los propios desplazamientos por todo el mundo. Emirates, Riyadh Air, Turkish Airlines o Vueling son solo algunas compañías que han decidido asociar su imagen con equipos de fútbol o baloncesto, conscientes del mercado global en el que vivimos y que puede suponer un retorno multimillonario solo en concepto de imagen.
El Real Madrid luce en sus camisetas el logo de Emirates (Fly better) desde 2013 y en 2022 renovó el acuerdo hasta 2026 por una cifra cercana a los setenta millones de euros, manteniéndose como el primer patrocinador global del club blanco. Su impacto cada vez que juega Vinicius, Jude Bellingham o Kylian Mbappé, figuras globales, es incalculable a nivel de marketing, sobre todo cuando celebran un gol y su imagen da la vuelta al mundo.
Otra aerolínea de Oriente Medio, en este caso Riyadh Air, de Arabia Saudí, da nombre recientemente al estadio Metropolitano del Atlético de Madrid. La compañía, que surgió en 2023 bajo el amparo del Fondo Soberano de Inversión de Arabia Saudí (PIF), estará presente en el club rojiblanco hasta 2033, por una cantidad que oscila entre los 250 y 300 millones de euros.
Este mismo año, el Athletic Club de Bilbao aprovechó la disputa de la final de la Copa del Rey en Sevilla para ampliar su patrocinio con Vueling, que lució su logo en la parte delantera del pantalón corto de juego, algo que ninguna marca había logrado hasta el momento.
Su rival en esa final, el Mallorca, también tiene un largo historial de acuerdos con aerolíneas, como Air Europa, la actual, o Spanair, cuyo logo lució en el centro de la camiseta en la final de Copa que el conjunto bermellón conquistó en 2003 frente al Recreativo de Huelva.
El 2 de marzo de 2022, la Real Federación Española de Fútbol alcanzó un acuerdo con Iberia por cinco años para que la aerolínea se convirtiese en la oficial de las selecciones absolutas masculina y femenina de fútbol durante ese periodo.
Javier Sánchez Prieto, en ese momento presidente de Iberia, compañía de la que se desvinculó en julio de 2023, aseguró que asociarse a la RFEF reforzaba su "papel de Embajadores Honorarios de la Marca España, permitiendo llevar la ilusión de todo un país a las distintas competiciones", como también ocurre con la aerolínea y el Comité Paralímpico Español, del que es patrocinador del Plan ADOP.
Fuera de España, una de las relaciones más longevas entre una aerolínea y un club deportivo es la del Manchester City y Etihad Airways, de Emiratos Árabes Unidos. Empezó en 2011 y, desde entonces, su nombre luce en la camiseta y da nombre al estadio, Etihad Stadium, en la que está siendo la etapa más exitosa del club en cuanto a trofeos bajo el liderazgo de Pep Guardiola.
Otra aerolínea, Qatar Airways, también está bien posicionada en el mercado futbolístico con su 'buque insignia', el París Saint Germain, y con la FIFA y la UEFA, aunque anteriormente también pasaron por clubes como el Barcelona, la Roma o Boca Juniors.
Vueling, compañía perteneciente al grupo IAG, y el Bilbao Basket han renovado esta semana su acuerdo de patrocinio para la temporada 2024/25, consolidando una alianza que desde mayo de 2023 refuerza el compromiso de la aerolínea con Bilbao, la segunda base más importante de la compañía en España.
De este modo, Vueling es un año más la aerolínea oficial del equipo, encargándose de los desplazamientos durante las competiciones nacionales y europeas. Además, la imagen de la compañía seguirá luciendo en las camisetas del equipo, tanto en la Liga Endesa (ACB) como en la Fiba Europa Cup. La aerolínea también estará visible en las instalaciones de Miribilla y en la mascota oficial del Bilbao Basket.
Esa no es la única aerolínea que está ligada al baloncesto. Un ejemplo es Turkish Airlines, que da nombre a la Euroliga, la máxima competición de clubes de baloncesto en Europa y que reúne a los 18 mejores clubes del continente. EFE