Nicaragua condena "cobarde ataque" de Israel contra la histórica Palmira, centro de Siria

San José, 20 nov (EFE).- El Gobierno de Daniel Ortega condenó este miércoles el "cobarde ataque por parte del Gobierno Sionista de Israel en la ciudad histórica de Palmira", en el centro de la "hermana" República Árabe Siria, que consideró fue una "completa violación al respeto de la vida, la soberanía e integridad territorial de este país amante de la paz".

"Las continuas agresiones del Estado de Israel en la región de Oriente Medio solo demuestran con mayor claridad el total desprecio de este país por el Derecho Internacional, el Derecho Internacional Humanitario y los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, provocando mayor inestabilidad en la región y en el mundo", denunció el Ejecutivo sandinista en una declaración.

"Nuestro Gobierno -que rompió relaciones con Israel en solidaridad con Palestina- expresa su firme solidaridad con el pueblo y Gobierno de la República Árabe Siria, con las familias de los mártires y todos los heridos víctimas de este cruel acto terrorista", continuó Managua.

Nicaragua dijo que, "como siempre", su denuncia y su voz es "firme, alzada, congruente y consecuente con la paz, la Justicia y la esperanza".

Al menos 46 personas murieron y más de 50 resultaron heridas este miércoles en un ataque de Israel contra la ciudad de Palmira, aledaña a las importantes ruinas del mismo nombre, declaradas Patrimonio de la Humanidad, en el centro de Siria, informó la ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

La ONG, con sede en el Reino Unido y con una amplia red de colaboradores sobre el terreno, aseguró que un bombardeo tuvo como objetivo un almacén de armas situado cerca de una zona industrial, en el bario de Al Jamiya, en la que residen familiares de milicianos iraquíes y otro tuvo como blanco un lugar en la misma área, sin ofrecer más detalles.

En las últimas semanas, Israel ha incrementado considerablemente sus ataques en territorio sirio, especialmente contra la capital, Damasco, y sus alrededores, además de la zona de Al Quseir, fronteriza con el Líbano y desde donde el Ejército israelí asegura que el grupo chií libanés Hizbulá transfiere armas.

Estos ataques han causado decenas de víctimas, entre ellas civiles. Según las fuerzas israelíes, van dirigidos contra almacenes de armas de Hizbulá y altos cargos de grupos palestinos, aunque las autoridades denuncian que muchos de estos bombardeos han impactado directamente contra zonas residenciales.

Palmira, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1980, alberga las ruinas monumentales de una gran ciudad que fue uno de los centros culturales más importantes de la Antigüedad, sometida a la influencia de diversas civilizaciones, entre ellas la griega clásica, la romana y la persa, además de tradiciones autóctonas. EFE