Río de Janeiro, 19 nov (EFE).- El canciller alemán, Olaf Scholz, abogó este martes ante el presidente de China, Xi Jinping, por trabajar juntos en pro de la paz y seguridad en el mundo, en una alusión a la guerra rusa en Ucrania, pero también indirectamente al conflicto en torno a Taiwán.
"Nadie debe temer a su vecino. Este es un principio central de la paz en el mundo, y uno que estamos trabajando muy duro para promover", dijo Scholz al inicio de la reunión bilateral en los márgenes de la cumbre del G20 en Río de Janeiro.
A juicio del canciller los dos debían hablar de temas difíciles, como "la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, por ejemplo, o situaciones peligrosas como las que vemos en otras partes del mundo, por ejemplo a raíz de los acontecimientos en Oriente Medio".
La frase del vecino fue interpretada en Alemania no solo como una alusión de la invasión de Ucrania por parte de Rusia hace ya mil días, ya que Xi y el presidente ruso, Vladímir Putin, son socios muy cercanos, sino también a Taiwán, una isla gobernada de forma autónoma desde 1949 y considerada por China como una provincia rebelde.
Según dijeron antes de la reunión fuentes del Gobierno alemán, Scholz quería abordar con Xi también la presencia de los soldados norcoreanos en territorio ruso, donde combaten del lado de las fuerzas del Kremlin para tratar de expulsar a las tropas de Kiev de la región rusa de Kursk, y las informaciones que apuntan a suministros de drones chinos a Moscú.
"Siempre es un tema de mis conversaciones advertir a todo el mundo de que están suministrando armas letales a Rusia. Y por eso será también en el futuro, un tema central", dijo Scholz el lunes cuando se le preguntó si abordará la supuesta entrega de drones chinos a Rusia en su reunión con Xi.
Según la ministra alemana de Exteriores, Annalena Baerbock, el Gobierno alemán asume que China está apoyando a Rusia con aviones no tripulados y amenazó a Pekín con sanciones.
Al margen de una reunión de la Unión Europea (UE) celebrada el lunes en Bruselas, dijo que "esto debe tener y tendrá consecuencias, al igual que lo ha tenido el suministro de drones suicidas Shahed iraníes a Rusia.
Además, para el canciller era importante tratar con Xi la importancia de que exista una igualdad de condiciones a la hora de competir a nivel comercial con China.
"(...) tenemos que garantizar que la igualdad de condiciones acompañe a las actividades económicas de las empresas", advirtió al presidente chino en respuesta a las acusaciones de distorsión de la competencia por parte de China.
Esto es "absolutamente central" para el trabajo en el futuro, recalcó Scholz, quien también subrayó que ambos hablarían de las "relaciones estratégicas" entre ambos países. EFE
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