Kiev, 18 nov (EFE).- Unos 321.000 abonados continúan sin electricidad en la ciudad y la región de Odesa, en el sur de Ucrania, como consecuencia de los destrozos causados por el más reciente ataque masivo ruso con misiles y drones contra el sistema energético ucraniano, según informó este lunes la empresa eléctrica privada DTEK.
“En la región continúan los trabajos de reparación de emergencia”, se lee en un comunicado emitido por la compañía, que informó el domingo de “daños significativos” en sus centrales eléctricas a causa del ataque ruso.
La compañía explica asimismo que unos 400.000 abonados que se habían quedado sin luz debido al ataque ya vuelven a recibir suministro.
Rusia atacó en las primeras horas del domingo varias regiones ucranianas con 120 misiles de distintos tipos y 90 drones kamikaze. El principal objetivo del ataque fue el sistema eléctrico ucraniano.
Debido a los destrozos causados, Ucrania vuelve a sufrir un déficit de electricidad que ha empezado a compensar este lunes con la programación de apagones para racionar el consumo, el cual alcanzará su pico anual en unas semanas con la llegada de las temperaturas más bajas.
Rusia ha lanzado desde el pasado mes de marzo una decena de ataques masivos contra las centrales eléctricas y otras infraestructuras energéticas ucranianas.
Con ayuda técnica y financiera occidental, y con importaciones de electricidad de sus vecinos de la UE, Ucrania había conseguido evitar los apagones en los últimos meses, pero el ataque del lunes amenaza con volver a dejar a oscuras durante buena parte del día a los ucranianos en las próximas semanas. EFE