El primer ministro interino de Líbano, Nayib Mikati, ha afirmado este lunes que Beirut ha dado una respuesta "positiva" a la propuesta de alto el fuego presentada por Estados Unidos, si bien ha recalcado que aún quedan puntos por discutir de cara a la visita que se espera que realice el martes al país el enviado de Washington, Amos Hochstein, quien ha aplazado la visita a Beirut prevista inicialmente para este martes.
Mikati ha afirmado en una entrevista concedida a la cadena de televisión Al Araby TV que la respuesta ha sido "positiva, con algunos matices". "Hay algunas cosas que no están claras y queremos aclararlas para que no haya confusiones en el futuro", ha manifestado, antes de agregar que una discusión "cara a cara" podría acelerar las conversaciones.
En este sentido, ha hecho hincapié en que las autoridades libanesas esperan lograr "cuanto antes" un alto el fuego y ha reiterado el respaldo de Beirut a la aplicación de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, que implicaría la retirada del partido-milicia chií Hezbolá al norte del río Litani, situado a unos 30 kilómetros de la frontera con Israel.
Asimismo, ha subrayado que el presidente del Parlamento libanés, Nabih Berri, está encabezando las conversaciones con Hochstein --quien tenía previsto viajar a Líbano este martes-- sobre un posible alto el fuego. "Estoy en constante contacto con él", ha dicho, antes de incidir en la necesidad de poner fin "a la destrucción y el derramamiento de sangre" en el país.
Más tarde, se ha sabido que el propio Hochstein ha trasladado a Berri que aplaza su viaje a Beirut a la espera de que se aclare la postura de Líbano sobre la propuesta, según fuentes citadas por el diario libanés 'L'Orient-Le Jour'.
"La pelota está en el tejado libanés. Queremos respuestas de Líbano antes de que Hochstein parta hacia Beirut", ha indicado otra fuente citada por el portal estadounidense Axios.
Medios libaneses han destacado que la respuesta afirmativa de Líbano incluye también al partido-milicia Hezbolá, principal actor de la guerra con las Fuerzas Armadas israelíes.
Durante la jornada, el parlamentario Simon abú Ramia ha recalcado que el Gobierno libanés habría dado su "visto bueno" a la propuesta de Estados Unidos, en unas declaraciones formuladas tras reunirse con Mikati en el Gran Serrallo, según un comunicado publicado por la oficina del primer ministro a través de su cuenta en la red social X.
El diputado ha apuntado además a la existencia de "un ambiente muy positivo" y ha agregado que las autoridades esperan la visita de Hochstein y sus reuniones con Mikati y Berri de cara a poder avanzar hacia un alto el fuego. "Si no hay maniobras ni mala fe, a lo que estamos acostumbrados con los israelíes, habrá un acuerdo positivo", ha argumentado.
PLAN DE EEUU
Según un borrador de la propuesta estadounidense publicada por la televisión pública israelí Kan, el plan incluye un alto el fuego y la plena aplicación de la Resolución 1701, la creación de una comisión internacional de supervisión y el despliegue de unos 10.000 militares libaneses en la frontera con Israel.
Israel, por su parte, obtendría el reconocimiento a su derecho a la defensa y a responder a cualquier ataque procedente de suelo libanés, una cláusula cuestionada tanto por Hezbolá como por el Gobierno libanés.
"El texto del acuerdo de alto el fuego es bueno, pero da a entender que Isarel es el vencedor, por lo que puede que no se apruebe", ha argumentado una fuente libanesa citada por el portal de noticias libanés Al Hadath. "Hezbolá considera que la propuesta de Estados Unidos puede ser la base de un acuerdo, pero es necesario un largo debate", ha añadido, que comenzaría con la visita de Hochstein.
El Comité estaría presidido por Estados Unidos, pero también tendría representación de Italia, Francia, Alemania, Reino Unido, España, de la Fuerza Interina de Naciones Unidas en Líbano (FINUL) y de varios países más de la región.
Israel desató el 1 de octubre una nueva invasión de Líbano tras varias semanas de intensos bombardeos y ataques contra el país, incluida la explosión coordinada de miles de dispositivos de comunicación utilizados por el grupo libanés, después de más de once meses de combates con Hezbolá en la zona fronteriza. Líbano ha denunciado cerca de 3.500 muertos desde el estallido de las hostilidades el 8 de octubre de 2023.
El repunte de las hostilidades se enmarca en los enfrentamientos iniciados hace más de un año, después de que Hezbolá atacara territorio israelí tras los ataques perpetrados el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) y otras facciones palestinas, que llevaron a Israel a desatar una cruenta ofensiva contra la Franja de Gaza, donde han muerto ya más de 43.800 personas.