Las autoridades de Pakistán han anunciado este miércoles la muerte de doce supuestos terroristas en dos operaciones llevadas a cabo por las fuerzas de seguridad en la provincia de Baluchistán (suroeste) y en la provincia de Waziristán Norte.
La Oficina de Información del Ejército (ISPR) de Pakistán ha explicado que durante la noche del martes al miércoles ha llevado a cabo una operación en la zona de Balgatar, ubicada en el distrito de Kech (Baluchistán), cerca de la frontera con Irán. Tras un "intenso intercambio de disparos", los militares paquistaníes han matado a cuatro "terroristas".
Entre los fallecidos está un "objetivo de alto valor", un líder del grupo, identificado como Sana Baru, que estaba a cargo del reclutamiento, especialmente de terroristas suicidas" y estaba en el punto de mira de las autoridades. Los agentes también se han incautado de armas y munición.
Asimismo, la ISPR ha informado de la muerte de ocho supuestos terroristas en una operación en la localidad de Miransá, capital de Waziristán Norte, que se encuentra en la provincia de Jaiber Pajtunjuá, antiguo bastión de los talibán paquistaníes, cerca de la frontera con Afganistán. También seis terroristas han resultado heridos.
Las fuerzas de seguridad paquistaníes han llevado decenas de operaciones durante los últimos meses contra el grupo Tehrik-e-Taliban Pakistan (TTP), conocido como los talibán paquistaníes y responsable de decenas de ataques contra las fuerzas de seguridad desde que diera por roto el alto el fuego en noviembre de 2022.
El grupo TTP, que difiere de los talibán afganos en asuntos organizativos pero sigue la misma interpretación rigorista del islam suní, aglutina a más de una docena de grupos de militantes islamistas que operan en Pakistán, donde han matado a unas 70.000 personas en dos décadas de violencia.