Cuenca (Ecuador), 12 nov (EFE).- Un contingente de 700 policías se ha desplazado hasta la ciudad andina de Cuenca para reforzar la seguridad como parte del operativo especial que la Policía Nacional de Ecuador tiene previsto realizar en el marco de la XXIX Cumbre Iberoamericana, que se celebrará los días 14 y 15 de noviembre.
Si bien los niveles de inseguridad de Cuenca no están entre los más altos, lo cierto es que desde finales de 2020 el país vive una oleada de violencia criminal causada por las bandas del crimen organizado, un fenómeno que en 2023 situó a Ecuador como la nación latinoamericana con más homicidios per cápita, con una tasa de 47,2 homicidios por cada 100.000 habitantes.
El coronel José Vargas, jefe policial de la Zona 6, que comprende las provincias de Azuay, Cañar y Morona Santiago, detalló a EFE que los agentes, pertenecientes a unidades de élite como Inteligencia y Aeropolicial, llegarán de todas partes del país.
"A través del patrullaje aéreo vamos a controlar lo que sucede dentro de la ciudad, especialmente los eventos que se van a realizar. De igual forma, hemos traído drones para vigilar constantemente los sectores donde existirá mayor cantidad de personas durante los actos", indicó.
También llegará a la ciudad un escuadrón de policías especializados en desarticulación de explosivos que verificará los lugares en donde estén los presidentes y altas autoridades, y se hará un "barrido electrónico" para evitar que operen dispositivos sin autorización.
"Tenemos canes antidrogas y además han venido unidades tácticas de la Policía Nacional (...), el operativo que se ha montado cubrirá y sobrepasará las expectativas de seguridad tomadas en consideración a este evento", subrayó.
El 9 de enero de este año, coincidiendo con el inicio del mandato del presidnete Daniel Noboa, un grupo de encapuchados fuertemente armado entró un estudio del canal TC Televisión, en Guayaquil y obligó al personal a tumbarse en el suelo, mientras se oían disparos y gritos. Las imágenes del suceso, emitido en directo, dieron la vuelta al mundo.
El suceso, que generó una profunda alarma social, se produjo además en medio de una oleada de violencia, fugas de narcotraficantes y disturbios en algunas prisiones que motivaron que el presidente Daniel Noboa declarara el estado de excepción en el país.
Este mismo martes, a dos días de la cubre, se produjo una nueva masacre en la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, la cárcel más violenta de Ecuador, con un balance de al menos quince reos asesinados y catorce heridos.
Mientras tanto en Cuenca, la Policía ha recibido cuatro alertas de eventuales manifestaciones durante los días de la Cumbre Iberoamericana, por lo que ha hecho un llamado a los convocantes para que desistan de realizar protestas o, al menos, las hagan de manera pacífica.
"Que lo hagan con el respeto que se merece el resto de la población, tomando en consideración que la gran mayoría de la población azuaya y cuencana está recibiendo con agrado y placer a la gente que viene a la Cumbre Iberoamericana", enfatizó el jefe policial.
Algunas calles de la ciudad, situada en el sur del país, estarán cerradas durante los días de la cita internacional, especialmente las cercanas al Museo Pumapungo, que será la sede de la reunión de Jefes y Jefas de Estado y de Gobierno, así como de otras autoridades como cancilleres.
"Vamos a procurar que las actividades de los ciudadanos de Cuenca se desarrollen de la forma habitual para evitar molestias", recalcó el coronel José Vargas. EFE