Las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS) han anunciado este lunes la detención de un "peligroso" miembro de Estado Islámico en una operación de seguridad en el campamento de Al Hol, en el noreste de Siria, y hogar de miles de personas, muchas de ellas familias de combatientes del grupo terrorista.
En un comunicado publicado en su página web, las FDS, formadas principalmente por milicianos kurdos, han indicado que el individuo capturado era "responsable de planear grandes ataques terroristas y había sido buscado por las fuerzas militares y de seguridad durante dos años".
La detención de este "peligroso terrorista" se une a la de otros diez presuntos miembros de Estado Islámico el domingo en el marco de la operación 'Seguridad Permanente' lanzada la semana pasada por las kurdas Unidades Femeninas de Protección (YPJ) y las fuerzas de seguridad internas, conocidas como Asayish, por lo que las FDS han celebrado el "éxito" de la actuación, durante la que fueron incautadas armas y municiones.
"Los elementos de la organización terrorista tratan de esconderse entre los civiles en las aldeas y dentro del campamento, y tan pronto como encuentran la oportunidad, llevan a cabo sus actos terroristas y criminales contra militares y civiles por igual", han señalado las FDS, asegurando así que la operación busca "limpiar" Al Hol y sus alrededores, y la "estabilidad y seguridad" de sus residentes.
Posteriormente, las fuerzas de seguridad internas de las autoridades kurdas han confirmado la muerte de tres agentes en un atentado con coche bomba en la ciudad de Hasaka (noreste), sin que por ahora haya reclamación de la autoría.
Así, han manifestado en un comunicado que "partes hostiles" perpetraron el ataque en el barrio de Al Salihiya, antes de afirmar que el explosivo fue activado por control remoto, causando la muerte de los tres ocupantes de un vehículo de las fuerzas de seguridad.
Asayish ha especificado además que dos de los fallecidos resultaron heridos en el pasado en las operaciones llevadas a cabo por las FDS contra el grupo yihadista Estado Islámico, cuyo 'califato' territorial fue derrotado en el país en 2019.
Las FDS, formadas principalmente por milicianos kurdos, y su gran aliado, Estados Unidos, aseguran que el campamento es un "caldo de cultivo" para una futura generación de yihadistas porque siete de cada diez ocupantes tiene menos de doce años y existe una amplia presencia de células yihadistas durmientes entre las más de 70.000 personas que siguen viviendo allí.