El primer ministro Jugnauth busca mañana un segundo mandato en las elecciones de Mauricio

Pravind Jugnauth desafía a la oposición en un clima electoral tenso, marcado por el histórico acuerdo sobre Chagos y la controversia del bloqueo de redes sociales en Mauricio

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Nairobi, 9 nov (EFE).- El primer ministro saliente de Mauricio, Pravind Jugnauth, buscará este domingo un segundo mandato de cinco años en las elecciones generales de este país insular del océano Índico.

Poco más de un millón de votantes registrados, de una población total de casi 1,3 millones de personas, elegirán a los nuevos miembros de la Asamblea Nacional (Parlamento unicameral), formada por 70 escaños, en 21 circunscripciones electorales.

Los mauricianos elegirán directamente a 60 diputados entre 891 candidatos, incluidos independientes y miembros de 73 partidos, en 340 centros de votación.

Otros dos escaños se reservan para la isla de Rodrigues, que es parte de la República de Mauricio, y los ocho asientos restantes se asignan a los mejores perdedores según perfiles para garantizar una equidad representativa de los principales grupos étnicos en la Asamblea Nacional.

El partido o coalición que logre controlar la mayoría de la Asamblea será el llamado a formar Gobierno en este país situado a unos 2.000 kilómetros de la costa sureste de África.

Jugnauth, de 62 años, ha sido primer ministro desde 2017, cuando sucedió a su padre, Anerood Jugnauth.

Su partido, el Movimiento Socialista Militante (MSM), obtuvo en 2019 la mayoría de los escaños en el Parlamento en unas elecciones que le brindaron un mandato de cinco años.

En los comicios de este domingo, el MSM encabeza la coalición Alianza del Pueblo (Alianza Lepep), que tendrá como principal adversario a otra coalición, la Alianza del Cambio, liderada por el Partido Laborista del ex primer ministro Navin Ramgoolam, de 77 años y quien busca volver a la jefatura del Gobierno.

Jugnauth ha acusado a Ramgoolam de "encarnar la inestabilidad" durante la campaña, mientras que el líder laborista ha asegurado que "la patria está en peligro" y ha prometido "reactivar la economía" nacional.

El mandatario saliente llegó a la campaña con el viento de cola después de que el pasado 3 de octubre Mauricio y el Reino Unido anunciaran un acuerdo histórico.

Según ese pacto, los británicos traspasarán la soberanía del archipiélago de Chagos al país africano tras 56 años de disputa, a cambio de garantizar el funcionamiento seguro, eficaz y a largo plazo de la base militar británico-estadounidense de la isla chagosiana de Diego García.

"Estamos en un gran momento de nuestra historia", resaltó entonces Jugnauth, al asegurar que el acuerdo supone la culminación de la descolonización británica en Mauricio.

Sin embargo, la campaña, que cerró este viernes, estuvo marcada por un hecho sin precedentes en la historia democrática del país: el pasado día 1, las autoridades anunciaron el bloqueo de las redes sociales hasta pasadas las elecciones.

La medida se implementó "en respuesta a las preocupaciones con respecto a publicaciones ilegales que constituyen una amenaza grave para la seguridad nacional y la seguridad pública".

Las autoridades se referían a la revelación de un programa de escuchas telefónicas dirigido a periodistas, políticos y personalidades influyentes, después de que un informante anónimo publicara las grabaciones en redes sociales y revelara la interferencia del Gobierno en instituciones clave del país.

La indignación popular fue tal, que el Ejecutivo levantó la prohibición en 24 horas tras un escándalo que ha manchado la reputación de la democracia mauriciana.

Desde que se independizó del Reino Unido en 1968, Mauricio ha desarrollado una economía respaldada por los sectores financiero, turístico y agrícola.

Según el Banco Mundial, Mauricio es "un modelo de éxito económico en África subsahariana", al evolucionar de una nación de bajos ingresos dependiente de la caña de azúcar en la década de 1960 a un país de ingresos medios-altos. EFE

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