El enviado de la ONU para Sudán del Sur avisa de una parálisis política y hastío popular en el país

La ONU señala un auge de la violencia intercomunitaria y un retraso electoral en Sudán del Sur que provoca frustración popular y advierte sobre la necesidad de avanzar hacia la paz y la democracia

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El enviado de Naciones Unidas y jefe de la misión de la ONU en Sudán del Sur (UNMISS), Nicholas Haysom, ha alertado al Consejo de Seguridad de que la estabilidad del país africano atraviesa un momento extremadamente delicado por la parálisis política que ha llevado a un "tan inevitable como lamentable" retraso electoral con la consiguiente y "profunda frustración" del pueblo sursudanés.

El período de transición en Sudán del Sur ha acabado ampliado a febrero de 2027 y las elecciones previstas inicialmente para finales de este año se han retrasado hasta diciembre de 2026. La violencia intercomunitaria, la guerra en el vecino Sudán y la incapacidad de ejecutar de una vez por todas el Acuerdo Revitalizado de Paz que puso fin a la guerra que estalló en 2013 entre las fuerzas del presidente, Salva Kiir, y el ahora vicepresidente, Riek Machar, han provocado que el avance político del país haya quedado "relegado a un segundo plano".

Haysom ha recordado que esta prórroga es la cuarta que se declara desde el final del conflicto armado en 2018 y avisado a las autoridades de que Naciones Unidas no verá con buenos ojos una nueva extensión. "El reloj ha empezado a correr y no se reiniciará en febrero del año que viene, cuanco comience la nueva extensión. De lo contrario, podríamos encontrarnos en la misma situación en diciembre de 2026", ha declarado el enviado.

"Esto no puede ser una situación normal para las partes en el acuerdo de paz, la élite política, los garantes del acuerdo de paz o la comunidad internacional. Debemos aprovechar colectivamente esta oportunidad para que esta prórroga sea la última y lograr la paz y la democracia que el pueblo de Sudán del Sur merece", ha añadido.

El jefe de la UNMISS ha avisado por último de un repunte de la violencia comunitaria en varios estados del país según ha ido terminando la temporada de lluvias y alertado de un "alarmante número de víctimas civiles en los estados de Alto Nilo, Equatoria Central y Warrap".

"La UNMISS sigue implementando su mandato de protección de los civiles, pero no podemos estar en todas partes a la vez, y una protección física estática tampoco es una solución permanente en estas circunstancias", ha declarado Haysom, quien ha llamado tanto a Kiir como a Machar a que "unifiquen y desplieguen a sus propias fuerzas" en los estados afectados "porque es la única manera de prevenir, de manera sostenible, las muertes de civiles".

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