Finalmente Elisa Mouliaá no ha declarado este jueves ante el juez Adolfo Carretero en los Juzgados de Plaza de Castilla para ratificar su denuncia por agresión sexual contra Íñigo Errejón como estaba previsto, sino que su citación en los tribunales se ha pospuesto al próximo martes 12 de noviembre a petición de la abogada de la actriz.
El motivo tendría que ver con la estrategia ante el proceso, solicitando al magistrado más tiempo para preparar la causa porque hay más mujeres que se han sumado a la intérprete y quieren denunciar diferentes delitos sexuales cometidos, presuntamente, por el exportavoz de 'Sumar' en el Congreso de los Diputados. En total serían 16 víctimas de diferentes ciudades de nuestro país.
Será el martes a las 9.00 cuando Elisa comparezca ante el juez, una hora antes que el propio Errejón, citando en calidad de imputado en el Juzgado de Instrucción número 47 de Madrid a las 10.00 horas, por lo que no se descarta que puedan coincidir en el interior de las dependencias judiciales.
"Se ha pedido el aplazamiento y lo han pedido por las dos partes, o sea que no puedo decir nada" ha explicado nerviosa la actriz, asegurando que el motivo de este cambio en su declaración ante el juez se debe a que otras 15 víctimas se van a sumar a su denuncia contra el expolítico: "Sí, hay más mujeres. He hablado con ellas y es fuerte, muy fuerte, fuerte y triste". "Están reuniendo fondos para poder denunciar porque es un proceso costoso. Va a haber más denuncias" ha señalado.
Sobrepasada, Elisa ha pedido a la prensa que la dejen tranquila. "Yo ya he dicho todo lo que tenía que decir, he contado mi historia y no quiero nada, porfa. Esto va a ser fuerte y espero que sea un antes y un después y que siente un precedente" ha expresado, confesando que lo único que quiere es "volver a estar tranquila con mi vida" pese a su denuncia contra Errejón.
Por último, la intérprete ha asegurado que no sabe "qué va a pasar" ni tiene "ni idea" de si el próximo martes se verá las caras con el exdiputado en los Juzgados, pero sí ha reconocido que "no tengo ganas de volver a verle".
Intentando retomar la normalidad a pesar de estar en el foco de la noticia tras relatar el delicado episodio que vivió con Errejón cuando presuntamente la agredió sexualmente, Elisa se ha reencontrado con un buen amigo en una terraza de la capital, donde se la vio de lo más sonriente y expresiva mientras disfrutaba de una cerveza.