Lisboa, 5 nov (EFE).- El estadio José Alvalade de Lisboa, donde este martes se disputa el partido de Liga de Campeones entre el Sporting y el Manchester City, no quiso despedirse del técnico Rúben Amorim, que se marcha al Manchester United, sin darle las gracias.
Este es el último encuentro del Amorim, de 39 años, en el campo de los 'leones', ya que su último partido al frente del equipo será el próximo 10 de noviembre en el estadio del Braga, en la liga portuguesa.
El presidente del club lisboeta, Frederico Varandas, entregó al entrenador una placa, en la que se lee "gracias" y aparece un dibujo de Amorim con los cinco trofeos que ha ganado con el equipo, al tiempo que se desplegaba en la grada una lona con una ilustración similar.
Amorim lleva en el Sporting desde 2020. Estos años ha ganado con el equipo dos ligas portuguesas (20/21 y 23/24), una Supercopa de Portugal y dos Copas de la Liga de Portugal. EFE