Jerusalén, 4 nov (EFE).- La ONG israelí Peace Now se unió este lunes a las cada vez más voces dentro del país que acusan al Gobierno del primer ministro, Benjamín Netanyahu, de estar perpetrando crímenes de guerra contra el pueblo palestino y pidió a los militares de Israel que no acaten las órdenes para cometer dichas acciones.
"Una orden para cometer un crimen de guerra es una orden ilegal, la cual se debe rechazar", asegura la ONG en un breve comunicado en el que también acusa al Gobierno y al Ejército de "limpieza étnica".
Peace Now (Paz ahora, en español) acusa a los militares de estar implementando el denominado ‘plan de los generales’, propuesto hace meses por el mayor general retirado Giora Eiland, que aboga por forzar la evacuación de la población del norte de Gaza, incluso mediante la hambruna, y tratar como milicianos a quienes se queden.
"Bajo el nombre en clave de 'plan de los generales' estos días se están cometiendo crímenes de guerra horribles en el norte de la Franja de Gaza. Expulsión, hambre y desplazamiento de cientos de miles de residentes del área, con el fin de establecer asentamientos en el territorio despejado", dice la ONG.
La organización se une con su denuncia a la también ONG israelí B'Tselem, que el pasado 22 de octubre denunció una "limpieza étnica" en el norte de Gaza, donde el Ejército de Israel lanzó una nueva ofensiva a principios de ese mes.
B'Tselem solicitó a la comunidad internacional que "detenga la guerra y ponga fin a la carnicería".
"El mundo debe parar la limpieza étnica en el norte de Gaza", tituló entonces la ONG un comunicado en el que subrayó que "la magnitud de los crímenes que Israel está cometiendo actualmente en el norte de la Franja de Gaza en su campaña para vaciarla de los pocos residentes que quedan es imposible de describir".
La organización también denunciaba que "está más claro que nunca que Israel pretende desplazar por la fuerza a los residentes del norte de Gaza cometiendo algunos de los crímenes más graves según las leyes de la guerra", por lo que "las naciones del mundo deben actuar".
Asimismo, el domingo 27 de octubre el director del diario progresista israelí Haaretz, Amos Schocken, acusó a Israel de imponer un “régimen cruel de apartheid” a los palestinos y pidió sanciones internacionales contra sus líderes, informaron medios locales.
“Al Gobierno de (el primer ministro israelí, Benjamín) Netanyahu no le importa imponer un cruel régimen de apartheid a la población palestina. Desestima los costes que supone para ambas partes defender los asentamientos (en Cisjordania ocupada) mientras combate a los luchadores por la libertad palestinos a los que Israel llama terroristas”, dijo Schocken en una conferencia celebrada por su periódico en Londres.
Sus declaraciones le valieron duras críticas de varios ministerios, que ordenaron boicotear al diario. EFE