Las autoridades de Irán han ejecutado este lunes a un miembro de la comunidad judía iraní condenado por asesinato durante una pelea en 2022, después de que la familia de la víctima rechazara las propuestas de los familiares del acusado para resolver el asunto a través del pago de una compensación, ajusticiamiento que llega en medio del aumento de las tensiones entre Irán e Israel.
Según las informaciones recogidas por la agencia iraní de noticias Mehr, la ejecución ha sido llevada a cabo durante la jornada, después de que el Tribunal Supremo ratificara la sentencia y después de que "la familia de la víctima rechazara las propuestas" para alcanzar un acuerdo de carácter económico.
El condenado, identificado como Arvin Nathaniel Ghahremani, fue sentenciado tras matar a Amir Shokri durante una pelea derivada de un préstamo, según las autoridades. El acusado defendió en todo momento que se defendió tras ser agredido con un arma blanca durante la disputa y que fue en la misma en la que murió Shokri.
El presidente de la organización no gubernamental Iran Human Rights (IHR), Mahmud Amiri-Moqadam, ha indicado a través de su cuenta en la red social X que la ejecución llega tras "un caso y un proceso judicial marcado por fallas significativas, como en muchos otros condenados" en estos casos.
"Además de esto, Arvin era judío y el antisemitismo institucionalizado en la República Islámica ha jugado sin duda un papel crucial en la ejecución de su sentencia", ha dicho Amiri-Moqadam, quien ha recordado que el suceso tiene lugar "en medio de las amenazas de guerra con Israel".