Ciudad del Vaticano, 3 nov (EFE).- El papa Francisco pidió este domingo, al término del Angelus, que el principio enunciado en el artículo 11 de la Constitución italiana, en el que se repudia la guerra, "se aplique en todo el mundo" y volvió a pedir la paz para "la atormentada Ucrania, Palestina, Israel, Myanmar, Sudán del Sur".
Ante los cerca de 20.000 fieles reunidos en la plaza de San Pedro del Vaticano para escucharle, el pontífice quiso enviar un saludo a los voluntarios de la ONG Emergency del sur de Roma, "comprometidos en la aplicación del artículo 11 de la Constitución italiana".
Y leyó entonces íntegramente el artículo: "Italia repudia la guerra como instrumento de ofensa a la libertad de otros pueblos y como medio de solución de controversias internacionales; consiente, en igualdad de condiciones con los demás Estados, las limitaciones de soberanía necesarias para un orden que asegure la paz y la justicia entre las Naciones; promueve y alienta las organizaciones internacionales dirigidas a tal fin”.
"Que este principio se aplique en todo el mundo, que se destierre la guerra, se afronten los problemas con el derecho y la negociación, se silencien las armas y se dé espacio al diálogo. Recemos por la atormentada Ucrania, Palestina, Israel, Myanmar, Sudán del Sur", añadió.
Se trata de otro de los numerosos llamamientos efectuados por Francisco a favor de la paz, que este mismo domingo, en un mensaje con ocasión del centenario de la creación de la Administración Apostólica de Estonia, aseguró que la guerra en Ucrania recuerda "los momentos más oscuros" de la historia de Europa.
"Espero que, mientras los católicos de Estonia tratan de construir una sociedad enraizada en la paz, la justicia, la solidaridad y la dignidad de toda persona humana, cooperen cada vez más con hombres y mujeres de otras confesiones cristianas para dar testimonio unidos de las promesas de Dios", escribió a monseñor Philippe Jourdan, obispo de Tallín
Y agregó: "Esto es particularmente importante en el contexto de la actual guerra en Europa, que es fuente de profunda ansiedad y trágicamente se hace eco de los momentos más oscuros de los años pasados”.
El pontífice también pidió que "los cristianos estonios, junto con todas las personas de buena voluntad, tiendan la mano de la amistad a los refugiados y a los más vulnerables". EFE
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