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Valencia/Madrid, 2 nov (EFE).- La ola de solidaridad, con miles de personas desplazándose a las zonas más afectadas por las inundaciones en Valencia (este de España), continuó este sábado, una jornada en la que las víctimas se elevaron a 211 y en la que la búsqueda de desaparecidos y el reparto de suministros fue la prioridad.
A primera hora, miles de voluntarios se presentaron en el lugar designado en la ciudad de Valencia y pusieron rumbo, con enseres de limpieza y artículos de primera necesidad, a municipios de la provincia, a algunos de los cuales todavía no han llegado los efectivos más especializados.
El temporal, que azotó a la provincia de Valencia el pasado martes y provocó grandes inundaciones, no solo causó la muerte de más de 200 personas y un número indeterminado de desaparecidos, sino que causó importantes daños en infraestructuras, cultivos, negocios y casas, con tineladas de barro y lodo que aún se están retirando.
"Sabes lo que vas a encontrar. Si te encuentras personas fallecidas, es lo que puede pasar. Lodo, fango... eso es lo de menos, pero lo importante es de algún modo ayudar a las personas", relató a EFE Teo Colombia, un estudiante de Medicina que ha coincidido en el autobus con destino a Aldaia (València) con Gema Estéfano, otra joven que tenía "claro" que debía ayudar.
La solidaridad de los ciudadanos se sigue extendiendo desde todos los rincones del país y a todas las zonas dañadas.
Los reyes Felipe y Letizia viajarán mañana domingo a la Comunidad Valenciana, junto al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para conocer de cerca la situación y mostrar su apoyo a los afectados.
La ayuda desde otras regiones y provincias también continuó. El Ayuntamiento de Barcelona mandó los primeros convoyes de emergencia; el de Sevilla, coordinó el envío de 35.000 litros de agua potable, y la Comunidad de Madrid envió maquinaria pesada o equipos de reparación de infraestructuras.
El objetivo, hacer llegar alimentos, agua y artículos de primera necesidad a los miles de damnificados, limpiar las calles de lodo, establecer el suministro eléctrico y, lo más importante, salvar vidas y, en el peor de los casos, recuperar cadáveres.
Este sábado se conoció que una mujer fue rescatada con vida tras pasar tres días atrapada en el interior de un coche que había quedado en el fondo de un paso subterráneo en un puebblo de Valencia.
El jefe del Ejecutivo indicó que se va autorizar al Ejecutivo valenciano la posibilidad de realizar todos los gastos de urgencia que necesite, "sin límite alguno de recursos".
Además, las áreas más golpeadas, la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha, Andalucía, Cataluña y Aragón, las regiones donde más azotó el temporal, van a ser declaradas como zonas "gravemente afectadas por una emergencia de protección civil".
Esa decisión implica que se podrían adoptar, entre otras, medidas como la compensación a corporaciones locales por gastos derivados de actuaciones inaplazables; ayudas por daños en producciones agrícolas, ganaderas, forestales y de acuicultura marina, o la apertura de líneas de préstamo preferenciales subvencionadas, además de medidas fiscales.
Sánchez, que afirmó que el Gobierno solicitará la ayuda del fondo europeo de solidaridad y la utilización de otros recursos de apoyo comunitario, comunicó, además, que el Ejecutivo enviará a 5.000 militares más a la zona afectada por el temporal y a otros tantos guardias civiles y policías hasta llegar a sumar un total de 10.000 agentes de estos dos cuerpos.
"Estamos hablando del mayor despliegue de efectivos (...) que se haya hecho jamás en nuestro país en tiempos de paz", enfatizó el jefe del Ejecutivo, quien explicó que hasta el momento se rescataron a más de 30.000 personas en viviendas, carreteras y polígonos inundados.
Para Sánchez, la magnitud de esta catástrofe hace que estos números sean "insuficientes" porque, admitió, "la ayuda está tardando en llegar a muchos puntos y aún hay casas y garajes bloqueados, municipios anegados y mucha gente desvalida".
Los efectos del temporal han influido en todo tipo de actividades económicas, desde las agrícolas a las industriales y los servicios.
Por otro lado, ya se restablecieron el 94 % de los puntos de suministro eléctrico afectados y se recuperaron la mitad de las líneas telefónicas cortadas. EFE
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