San Juan, 31 oct (EFE).- La oposición de las Islas Vírgenes Británicas aseguró este jueves que seguirá adelante con sus planes de moción de censura contra el Gobierno, después de que este hiciera una maniobra para que no se pudiera presentar la víspera.
Los miembros del Gobierno abandonaron la sesión de la Cámara de la Asamblea cerca de la medianoche del miércoles justo antes de la moción de censura prevista por la oposición, por lo que no hubo quorum para la sesión.
La oposición, superada en número en la Cámara por un voto, dijo en una declaración que su preocupación y falta de confianza radica principalmente en el "liderazgo deficiente" y la "absoluta incompetencia" mostrada por el primer ministro Natalio Wheatley en su gestión de este territorio británico de ultramar.
En un comunicado, señaló que la moción de censura, que planea presentar, plantea cuestiones como la mala gestión económica, el descuido de la infraestructura pública y la falta de preocupación por el bienestar de la comunidad.
Según la moción, el primer ministro confesó haber cometido un error al estimar los aumentos salariales para los funcionarios, lo que resultó en una carga adicional de alrededor de 20 millones de dólares para los fondos públicos.
Cuando la víspera el líder de la oposición, Ronnie Skelton, procedió a leer su moción, fue interrumpido por la presidenta de la Cámara, Corine George-Massicote.
"Lo siento, se me ha informado de que no hay quorum", dijo la presidenta, tras constatar que no se llegaba al mínimo de siete miembros presentes.
George-Massicote procedió a suspender la sesión y convocó para el próximo 11 de noviembre.
Wealthy ganó las elecciones en abril de 2023, un año después de haber sustituido como primer ministro a Andrew Fahie, detenido el 28 de abril de 2022 en un aeropuerto del sur de Florida tras ser acusado de narcotráfico y lavado de dinero.
Fahie fue condenado el pasado agosto a 11 años de prisión por los mencionados cargos, que pusieron de manifiesto la corrupción existente en el territorio británico de ultramar. EFE