Fráncfort (Alemania), 31 oct (EFE).- El fabricante alemán Bosch descarta alcanzar sus pronósticos de crecimiento económico para 2024 y abre la puerta a nuevos recortes de personal ante la crisis del sector automovilístico en el país.
En una entrevista al diario alemán Tagesspiegel, el consejero delegado de Bosch, Stefan Hartung, aseguró este jueves que la compañía "no alcanzará sus objetivos económicos de 2024" y sus ventas serán "ligeramente inferiores" a las del año anterior.
En un principio, Bosch preveía que sus ventas crecieran entre un 5 y un 7 % en 2024, en comparación con el 3,8 % de 2023, cuando generaron unos ingresos de 91.600 millones a pesar de las desfavorables condiciones económicas y del mercado.
El directivo prevé que el rendimiento sobre ventas de la compañía sea como máximo del 4 %, frente al 5 % de un año antes, pero "mantiene firmemente en mente" el objetivo del 7 % para 2026.
Con respecto al empleo, la compañía anunció en los últimos meses varios planes para recortar puestos de trabajo en todo el mundo, que suman más de 7.000 afectados.
En este sentido, el directivo ha abierto la puerta a que este número sea aún mayor: "Actualmente no puedo descartar que tengamos que seguir adaptando las capacidades de personal".
Estas declaraciones llegan en un contexto en el que la compañía se está viendo afectada por el estancamiento de la producción de vehículos y la continua debilidad en el mercado de la ingeniería mecánica, lo que se está viendo reflejado en su cartera de pedidos.
En este sentido, Hartung pidió al Gobierno alemán que apoye a una industria en la que los problemas "son obvios", al tiempo que consideró que el pacto industrial anunciado por el canciller Olaf Scholz solo podría tener éxito si se dejaban de lado las diferencias políticas y luchaban por la misma causa. EFE