Rabat, 29 oct (EFE).- El presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó este martes ante el Parlamento marroquí que ha acordado con el rey Mohamed VI "escribir juntos un nuevo libro" en su relación bilateral para hacer frente "a los retos del siglo", una "oportunidad histórica y un deber estratégico" para ambos países.
En su visita de Estado de tres días a Rabat, Macron pronunció un discurso de más de media hora ante ambas cámaras marroquíes, interrumpido por aplausos en varias ocasiones, en el que comenzó apelando a la historia común y a su pasado colonial, afirmando que el protectorado marroquí "no escapó a las ambiciones y violencia de la historia colonial".
Macron, acompañado de una delegación de 120 personalidades -entre ellos 9 ministros-, fue recibido este lunes con honores por Mohamed VI y en su estancia se espera la firma de acuerdos comerciales e inversiones por un valor de 10.000 millones de euros.
Su visita pone fin a casi tres años de crisis diplomática y uno de sus puntos álgidos ha sido el discurso ante los parlamentarios, en el que Macron insistió en que se abre una "ocasión y necesidad de escribir este libro nuevo para hacer frente a los retos del siglo" y reiteró su apoyo a la soberanía marroquí sobre el territorio del Sáhara Occidental.
"Estoy seguro de que estos lazos se van a reforzar sin cesar", dijo el presidente francés, que destacó el "islam de tolerancia" promovido por Mohamed VI en Marruecos contra "toda forma de extremismo", unos valores de tolerancia que "Francia comparte profundamente".
Para Macron, Marruecos es también un "actor determinante en la escena internacional" y los 25 años de reinado de Mohamed VI encarnan "la continuidad de una de las dinastías más antiguas del mundo".
"En el próximo cuarto de siglo se definen todos lo desafíos y todas las posibilidades. Reafirmando un lazo de amistad único en este aniversario, veo la ocasión y la necesidad de escribir este nuevo libro para hacer frente a los retos del siglo. Es una oportunidad historia, sí, y diría que también un deber estratégico".
Macron mencionó también el fenómeno de la inmigación irregular y la necesidad de una "cooperación natural y fluida en material consular. "Esta es una cuestión de confianza recíproca", dijo, y enfatizó que "para muchos franceses constituye una de las expectativas más importantes", por lo que indicó que se necesitan "resultados".
También habló de la lucha contra el terrorismo, el narcotráfico y la criminalidad organizada para conseguir "un espacio dominado por la seguridad" y dar al Mediterráneo "su verdadera vocación de unión comercial".
Francia, dijo Macron, "siempre ha estado con Marruecos para acompañar su dinámica de crecimiento económico y social", y mencionó la colaboración con las empresas francesas en infraestructuras, energía, tratamiento de aguas o educación, recordando que Francia es el primer inversor extranjero en el país magrebí.
"Si hay un campo en el que persistimos en oponernos es el fútbol, porque es una pasión compartida", dijo Marcon entre risas de los asistentes al discurso, recordando el partido del Mundial 2022 en el que Francia descalificó a Marruecos en semifinales.
El presidente también se refirió al conflicto en Oriente Medio y las "consecuencias dramáticas" que está teniendo para la población civil, afirmando que "nada puede justificar el saldo humano desastroso en Gaza y el sufrimiento de la población civil".
Por ello, pidió de nuevo un alto el fuego en Gaza y también en Líbano, donde, dijo deben cesar las operaciones militares. "La vía de la diplomacia es posible y es la que apoya Francia", afirmó Macron, lo que permitirá a palestinos y libaneses "volver a sus casas". EFE
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